“Abrazos de Pulpitos” es un proyecto solidario sin fines de lucro emprendido por tejedores voluntarios. Se encuentra vigente en Argentina desde febrero de este año y un mes más tarde llegó a la provincia de Jujuy.
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“Abrazos de Pulpitos” es un proyecto solidario sin fines de lucro emprendido por tejedores voluntarios. Se encuentra vigente en Argentina desde febrero de este año y un mes más tarde llegó a la provincia de Jujuy.
La idea surge en el 2013 en Dinamarca y su nombre original es “Octopus for a preemie” (pulpo para un prematuro).
El objetivo de “Abrazos de Pulpitos” es tejer pulpos al crochet siguiendo un patrón original para ayudar a que los bebés prematuros logren una pronta recuperación y así, mejorar su calidad de vida en el período en el que se encuentran internados.
Es por eso que esta tarde a partir de las 15 se llevará a cabo en un multiespacio de calle Ramírez de Velazco 253 frente a conocido hotel céntrico, una jornada solidaria con el fin de recolectar hilo peruano, algodón mercerizado, macramé, bolsitas herméticas tipo ziploc, agujas 00 y 025 y vellón siliconado.
Los bebés prematuros pasan largos días internados en neonatología, durante esta etapa, tanto para los padres, pero principalmente para los bebés, el apego y el cariño son pilares fundamentales para lograr una rápida evolución.
Al tratarse de pequeños en esa condición es importante extremar las medidas, por eso, es indispensable que al momento de tejer los pulpos se siga el patrón original para que se teja en una sola pieza y no tenga costuras. El mismo cuenta con todas las especificaciones de calidad, tamaño y materiales que deben utilizarse para evitar la proliferación de bacterias y que éste sea apto para estar en contacto con el pequeño.
El pulpito se coloca adentro de la incubadora y sirve como elemento para desestresar al bebé que lo abraza y se siente acompañado.
A través de sus tentáculos, recuerdan al bebé una de las tantas experiencias intrauterinas que todavía necesita, como es el contacto que tenían con el cordón umbilical, generando un impacto directo en sus signos vitales como ser la frecuencia cardíaca y respiratoria, la temperatura corporal y la saturación del oxígeno, todos indispensables para su desarrollo neurológico.
A su vez, estudios observacionales indican que éste contacto evita que se arranquen las sondas o vías que pueden llegar a tener conectadas.
Mediante esto, buscan proporcionar un ambiente adecuado al recién nacido, que permita no sólo la curación de las patologías, sino también el desarrollo emocional del niño, la organización de su sistema nervioso y la aparición de un vínculo con sus padres.