Minuto a minuto se cuenta para el inicio de los desfiles en el canchón del Secundario 43. Para ellos la aventura está en pleno desarrollo.
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Minuto a minuto se cuenta para el inicio de los desfiles en el canchón del Secundario 43. Para ellos la aventura está en pleno desarrollo.
Los motivos serán los clásicos romanos, unas columnas ubicadas en el canchón ya avizoran el gran evento que vivirán.
Además, trabajan con materiales reciclables como Cds, sobre una súper estructura con brillo y color.
El proyecto nos dice el carrocero Jesús Tapia, "se inició antes de las vacaciones con algunos materiales, y estuvimos en la espera del chasis.
Ya contamos con uno para poder armar la estructura y estamos haciendo todo lo posible para llegar".
Desde tempranas horas ellos están en el patio de su colegio terminando de armar sus estructuras.
Los jóvenes comentaron que en esta semana ya montarán los diseños para empezar con la decoración de flores y otros detalles.
Si bien la etapa de los estudiantes la viven a pleno y cuando menos se lo esperan el día del debut llegará.
Los carroceros se ven comprometidos con su diseño y expresan que "ser carroceros es la mejor etapa que puede vivir un estudiante en la secundaria y sólo es cuestión de disfrutarla".
Camperas de la "promo" 17, mamelucos, se ven por doquier, algunos concentrados en pequeños detalles y otros en grupos compartiendo charlas y elementos de trabajo.
"Todos con un mismo fin, trabajar por su carroza y representar a su colegio de la mejor manera", comentaron los carroceros.
Las jovencitas cumplen un rol fundamental, son las encargadas de embellecer la carroza.
Agustina Gutiérrez nos comenta que están incorporando diferentes técnicas de flores y gusanitos con papel metalizado.
Algunos diseños se lucirán en el techo de la carroza, y en las macetas se verán unas flores violetas que le darán esa pisca de glamour a la decoración.
No cabe dudas de que la convivencia de los carroceros genera singulares experiencias que disfrutan a pleno.
Veloces y positivos, los chicos no dan tregua al corto tiempo, ya que trabajan en grupos y muestran que no hace falta ser profesionales técnicos de carrozas para armar sus obras de arte.
En el tiempo libre que les dejan sus ocupaciones, los alumnos disfrutan de la música, charlas y chistes.
Los jóvenes comentaron que necesitan botellas de 3 litros que se usarán para forrar una parte de la carroza.