En 2016 el Elenco Estable del Colegio Secundario de Arte Nº 42 (Alto Comedero) participó de la 8º edición Festival Vamos que Venimos en Buenos Aires, con la creación colectiva El Familiar. Tras esta experiencia, los profesores Gustavo Ramírez, Tania Quipildor, Franco Paredes, Fabio Sánchez y Saturnino Peñalba se propusieron replicar el Festival porteño en Jujuy. El proyecto se concretó con el Vamos que Venimos NOA, festival de teatro adolescente, que se llevó a cabo en diferentes sedes provinciales durante los días 9 al 12 de agosto. Vamos que Venimos NOA cuenta con el apoyo del Secundario de Arte Nº 42, Gobierno Provincial y los municipios de San Salvador, el Carmen, Perico y Palpalá.
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En 2016 el Elenco Estable del Colegio Secundario de Arte Nº 42 (Alto Comedero) participó de la 8º edición Festival Vamos que Venimos en Buenos Aires, con la creación colectiva El Familiar. Tras esta experiencia, los profesores Gustavo Ramírez, Tania Quipildor, Franco Paredes, Fabio Sánchez y Saturnino Peñalba se propusieron replicar el Festival porteño en Jujuy. El proyecto se concretó con el Vamos que Venimos NOA, festival de teatro adolescente, que se llevó a cabo en diferentes sedes provinciales durante los días 9 al 12 de agosto. Vamos que Venimos NOA cuenta con el apoyo del Secundario de Arte Nº 42, Gobierno Provincial y los municipios de San Salvador, el Carmen, Perico y Palpalá.
Rescato del Vamos que Venimos NOA, entre otros aspectos, la excelente convocatoria de público que obtuvo. Este Festival promueve el intercambio de experiencias y encuentro entre pares (adolescentes y profesores de teatro), generando audiencia a partir de cuatro estrategias claves. En primer lugar, está orientado a un segmento de público específico. Los alumnos participantes del Festival convocan a su círculo más cercano (familiares, amigos, conocidos..etc), que asisten al teatro para acompañar y disfrutar el logro de su anfitrión: estar programado en un festival. Los adolescentes participan en bloque de las actividades que proponen sus pares. En este sentido, uno de los aciertos del Vamos que Venimos NOA fue la inclusión de los alumnos en la organización del Festival, de manera tal, que lo transformaron en un proyecto liderado por jóvenes adolescentes. En tercer lugar, la gratuidad de la entrada democratiza el ingreso de los adolescentes a espacios para ellos bloqueados, como el Teatro Mitre, debido a que el promedio de costo de entrada es muy superior a lo que este segmento de público puede abonar. El último factor que incidió en el éxito de público del Festival consiste en el trabajo continuado y sistemático del núcleo gestor del proyecto: la organización a cargo. Destaco además de este Festival la coherencia que mantienen los principios de curaduría, condiciones de acceso al evento y adaptación de los contenidos del programa a la audiencia específica para la que trabajan. Siempre es maravilloso ver un teatro lleno de chicos jóvenes y familias completas. En este sentido, Vamos que Venimos NOA realizó una impecable tarea de recuperación de la función primaria del teatro: convertir al espacio físico (teatro) en un lugar de encuentro, donde se produce la mágica fusión de presentación/representación de la particular visión que los seres humanos tenemos de nuestra participación en el mundo. Retornar a esta función primaria del acontecimiento teatral, convocando a público adolescente, sin duda es una tarea que debe continuarse. Con tal motivo, acompaño a este festival con los mejores deseos para que se consolide y desarrolle en futuras ediciones.
Tendencias festivaleras jujeñas
Cuatro festivales de teatro en la provincia fueron al inicio réplicas de marcas foráneas: Entepola, Festival de Narración Oral, la Mujer en la Escena y Vamos que Venimos. Con el paso de las ediciones, los proyectos locales de réplicas perfilan su propia identidad, quizá distanciándose de la marca original. Es lícito pensar que posiblemente resulte mucho más sencillo posicionar a un festival réplica de marca consolidada, que desarrollar nuevos modelos de festivales genuinamente jujeños. Por fortuna, en el calendario de festivales teatrales de la provincia conviven varios formatos: institucionales (promovidos por organismos públicos), mixtos (originalmente independientes y absorbidos por la Administración Pública) e independientes (algunos de los cuales gestaron modelos propios de festival). Esta misma semana, coincidiendo con el Vamos que Venimos NOA, el Instituto Nacional de Teatro programó 20años20obras que, en alguna función, no logró una convocatoria de público superior a la decena de espectadores. Esta falta de acompañamiento de público debe funcionar como evaluador y, en ningún caso, ser ignorado por este tipo de Organizaciones que administran fondos públicos. Tal vez, puedan capitalizar la experiencia festivales independientes respecto de estrategias para captar audiencia y, especialmente, coordinar calendario de programación con los mismos. En lo que va de año, el Instituto Nacional del Teatro no resolvió ningún subsidio para Festivales de Teatro en Jujuy, por lo tanto, todos los celebrados esperan esta ayuda económica.
