El juicio oral y público que se le sigue a tres jóvenes acusados de agredir y provocar graves secuelas en la salud de un efectivo policial, en un hecho ocurrido en agosto del 2015 en la ciudad de Monterrico, está tomando forma y según el relato de las personas que prestaron declaración testimonial en la primera audiencia, los inculpados están muy comprometidos.
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El juicio oral y público que se le sigue a tres jóvenes acusados de agredir y provocar graves secuelas en la salud de un efectivo policial, en un hecho ocurrido en agosto del 2015 en la ciudad de Monterrico, está tomando forma y según el relato de las personas que prestaron declaración testimonial en la primera audiencia, los inculpados están muy comprometidos.
En la sala de audiencias del octavo piso del Palacio de Tribunales se desarrolla el juicio que tiene como protagonistas a Franco Carlos, Jonatan Gregorio y César Villegas, quienes están imputados de ser los supuestos autores de los delitos de "tentativa de homicidio calificado agravado por el número de participantes y por la condición de la víctima", "robo calificado en poblado y en banda y por el uso de arma de fuego", en contra de una pareja, el efectivo policial Horacio Gutiérrez y Florinda Mendoza.
La testigo y una de las víctimas de las agresiones, Mendoza detalló ante el Tribunal en lo Criminal N° 1 los momentos de pánico que vivió cuando su pareja fue atacada por al menos cinco personas en la avenida España de la ciudad tabacalera.
"Mi marido se bajó de un remis en la rotonda, cerca de las parada de taxis que van para Perico, él tenía que ir para allá, yo continué viaje. Vi que un grupo de personas se le acercaron y él no caminaba hasta la parada, le pedí al taxista que detuviera el vehículo y me bajé para ayudarlo, porque algo no estaba bien", dijo la mujer.
En otro tramo de su relato, Mendoza dijo que Gutiérrez se trenzó en una pelea con uno de sus agresores, pero inmediatamente fue reducido por los otros, propinándole golpes en distintas partes del cuerpo, y un hombre de atrás le pegó con un ladrillo a la altura del oído
"Otro hombre partió una botella de vidrio y quería agredirlo a mi marido, yo le arrojé mi campera para que se cubriera, me puse en el medio de los hombres que golpeaban a mi marido, pensando que a mí no me harían daño, pero uno de ellos me pegó una piña en la cara", dijo.
Además la mujer identificó a un hombre que lo amenazaba con un arma de fuego, según ella era el mismo que conducía un vehículo negro, de donde se habían bajado los otros agresores.
El relato del efectivo Horacio Gutiérrez fue muy disperso y allí fue cuando los abogados defensores entraron en acción. Pero sus preguntas pretendían envolverlo en que si estaba o no de novio con Mendoza, muy lejos de intentar desprender a sus defendidos de los hechos.
Según el informe médico de Patricia Guardiani, galena de la fuerza policial, Gutiérrez había sufrido un traumatismo encéfalo craneal con pérdida de conocimiento, además de una otorragia (sangrado en los oídos), e incontables hematomas y moretones que le dejaron sus atacantes.
Los imputados Carlos, Gregorio y Villegas se abstuvieron de prestar declaración testimonial ante el Tribunal. La segunda audiencia continúa mañana a las 8.30 con la convocatoria de nuevos testigos propuestos por las partes.
