Activistas se congregaron ayer por la mañana en las puertas del parque acuático Mundo Marino, ubicado en la ciudad bonaerense de San Clemente del Tuyú, para protestar por el “incumplimiento de una ordenanza de La Costa que prohíbe los espectáculos con animales” y para pedir por la rehabilitación de la orca Kshamek, mientras que desde la empresa afirmaron que “cumplen con la normativa vigente”.
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Activistas se congregaron ayer por la mañana en las puertas del parque acuático Mundo Marino, ubicado en la ciudad bonaerense de San Clemente del Tuyú, para protestar por el “incumplimiento de una ordenanza de La Costa que prohíbe los espectáculos con animales” y para pedir por la rehabilitación de la orca Kshamek, mientras que desde la empresa afirmaron que “cumplen con la normativa vigente”.
“Queremos que saquen a todos los animales de los shows”, aseguró Dalila Lewis, militante de la organización Animalistas de la Costa, quien se quejó de que los ejemplares “para estar entrenados tienen que pasar por el maltrato sólo para que la gente tenga un rato de diversión”.
La protesta de concientización se repite año a año con pancartas, folletos y banderas “en defensa de los derechos de los animales cautivos en dicho establecimiento” y reúne a diferentes grupos de Buenos Aires y La Costa, donde encabezan las organizaciones Activistas Animalistas de La Costa, SinZoo y Animal Libre.
En esta ocasión, los activistas pidieron el cumplimiento de la ordenanza 2904/06, vigente en La Costa y que prohíbe los espectáculos con animales.
“La gente se sorprendió, no tenía ni idea de que pasaban estas cosas”, aseveró Lewis y comentó que las actividades de protesta también comprenden entregar folletos en el centro y en la playa de San Clemente de Tuyú.
Asimismo, los manifestantes pidieron la rehabilitación de Kshamenk, “la única orca privada de la libertad en Sudamérica desde el año 1992”, que cuenta además con una petición online que supera las 42.500 firmas la página de internet change.org/salvemosakshamenk.
“Queremos que se la saque del show y que pueda mejorar su calidad de vida, se tiene que cumplir con un plan de rehabilitación”, explicó Lewis.
En tanto, desde Mundo Marino rechazaron las acusaciones de los activistas y aseguraron que cumplen con la normativa vigente. “Hay una ley que prohíbe los espectáculos circenses con animales, pero nosotros somos una entidad que se dedica a la conservación y al bienestar de la fauna marina”, alegó Sergio Morón, biólogo y jefe del departamento educativo de Mundo Marino.