Cuatrocientas unidades de transporte urbano cada dos horas pasan por la calle Argañaraz, según una encuesta realizada por los vecinos. Las afectadas son más de 90 familias que piden ser escuchadas por las autoridades provinciales y municipales.
Es que no obtienen respuesta a ninguna de las notas presentadas desde octubre de 2016.
Los vecinos no se oponen al cambio de sentido de la calle, pero sí al tránsito público ya que todas las líneas pasan por allí y las consecuencias se hicieron sentir en las casas (varias están rajadas con grietas) y la falta de seguridad vial.
Les preocupa el embotellamiento constante de colectivos, el atropello de los choferes, principalmente cuestionan la anulación de calle Gorriti que sí tiene el ancho para su paso.
El cambio se debe a la obra de revalorización del casco histórico y en un primer momento era "temporal" aunque ahora parece que será definitivo; aunque no tienen respuesta concreta al respecto. Los vecinos recordaron que antes que se inicie la obra, dirigieron notas al municipio con la firma de los afectados y ninguna fue respondida.
Hoy esperan la respuesta del Defensor del Pueblo que quedó en expedirse sobre la situación que los aqueja.
Los vecinos proponen que la circulación sea por avenida Martiarena y regrese por avenida Italia de manera que se eviten accidentes de tránsito y dejar al hospital "San Roque" como al sanatorio privado que accedan a sus ambulancias, y a particulares a sus garajes. "En ciudades más avanzadas el transporte público no atraviesa el microcentro, con un poco de sentido común el tránsito solo es por avenidas y calle Argañaraz no es una avenida", planteó Fernando Eslinger, vecino de la zona.
"No podemos descansar tranquilos, el único día fue el jueves que no pasaron por esta calle pero después todos los días, el ruido es infernal, más la contaminación y la inseguridad", relató Leila Nasser.
Así también reclaman la falta de comunicación con los usuarios porque no les informan sobre las paradas y así los choferes por meses subieron y bajaron personas como quisieron. Y reclamaron la falta de respeto de los choferes de las unidades a peatones y autos particulares.
Otro planteo fue que en Argañaraz y Martiarena están realizando una obra porque el tránsito de colectivos destruyó esa esquina. "Ahora nos damos que Tribunales cedió terreno para que los colectivos doblen bien", acotó un vecino. Lo que es una señal de que seguirán transitando por allí.
Es que no obtienen respuesta a ninguna de las notas presentadas desde octubre de 2016.
Los vecinos no se oponen al cambio de sentido de la calle, pero sí al tránsito público ya que todas las líneas pasan por allí y las consecuencias se hicieron sentir en las casas (varias están rajadas con grietas) y la falta de seguridad vial.
Les preocupa el embotellamiento constante de colectivos, el atropello de los choferes, principalmente cuestionan la anulación de calle Gorriti que sí tiene el ancho para su paso.
El cambio se debe a la obra de revalorización del casco histórico y en un primer momento era "temporal" aunque ahora parece que será definitivo; aunque no tienen respuesta concreta al respecto. Los vecinos recordaron que antes que se inicie la obra, dirigieron notas al municipio con la firma de los afectados y ninguna fue respondida.
Hoy esperan la respuesta del Defensor del Pueblo que quedó en expedirse sobre la situación que los aqueja.
Los vecinos proponen que la circulación sea por avenida Martiarena y regrese por avenida Italia de manera que se eviten accidentes de tránsito y dejar al hospital "San Roque" como al sanatorio privado que accedan a sus ambulancias, y a particulares a sus garajes. "En ciudades más avanzadas el transporte público no atraviesa el microcentro, con un poco de sentido común el tránsito solo es por avenidas y calle Argañaraz no es una avenida", planteó Fernando Eslinger, vecino de la zona.
"No podemos descansar tranquilos, el único día fue el jueves que no pasaron por esta calle pero después todos los días, el ruido es infernal, más la contaminación y la inseguridad", relató Leila Nasser.
Así también reclaman la falta de comunicación con los usuarios porque no les informan sobre las paradas y así los choferes por meses subieron y bajaron personas como quisieron. Y reclamaron la falta de respeto de los choferes de las unidades a peatones y autos particulares.
Otro planteo fue que en Argañaraz y Martiarena están realizando una obra porque el tránsito de colectivos destruyó esa esquina. "Ahora nos damos que Tribunales cedió terreno para que los colectivos doblen bien", acotó un vecino. Lo que es una señal de que seguirán transitando por allí.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla
Cuatrocientas unidades de transporte urbano cada dos horas pasan por la calle Argañaraz, según una encuesta realizada por los vecinos. Las afectadas son más de 90 familias que piden ser escuchadas por las autoridades provinciales y municipales.
Es que no obtienen respuesta a ninguna de las notas presentadas desde octubre de 2016.
Los vecinos no se oponen al cambio de sentido de la calle, pero sí al tránsito público ya que todas las líneas pasan por allí y las consecuencias se hicieron sentir en las casas (varias están rajadas con grietas) y la falta de seguridad vial.
Les preocupa el embotellamiento constante de colectivos, el atropello de los choferes, principalmente cuestionan la anulación de calle Gorriti que sí tiene el ancho para su paso.
El cambio se debe a la obra de revalorización del casco histórico y en un primer momento era "temporal" aunque ahora parece que será definitivo; aunque no tienen respuesta concreta al respecto. Los vecinos recordaron que antes que se inicie la obra, dirigieron notas al municipio con la firma de los afectados y ninguna fue respondida.
Hoy esperan la respuesta del Defensor del Pueblo que quedó en expedirse sobre la situación que los aqueja.
Los vecinos proponen que la circulación sea por avenida Martiarena y regrese por avenida Italia de manera que se eviten accidentes de tránsito y dejar al hospital "San Roque" como al sanatorio privado que accedan a sus ambulancias, y a particulares a sus garajes. "En ciudades más avanzadas el transporte público no atraviesa el microcentro, con un poco de sentido común el tránsito solo es por avenidas y calle Argañaraz no es una avenida", planteó Fernando Eslinger, vecino de la zona.
"No podemos descansar tranquilos, el único día fue el jueves que no pasaron por esta calle pero después todos los días, el ruido es infernal, más la contaminación y la inseguridad", relató Leila Nasser.
Así también reclaman la falta de comunicación con los usuarios porque no les informan sobre las paradas y así los choferes por meses subieron y bajaron personas como quisieron. Y reclamaron la falta de respeto de los choferes de las unidades a peatones y autos particulares.
Otro planteo fue que en Argañaraz y Martiarena están realizando una obra porque el tránsito de colectivos destruyó esa esquina. "Ahora nos damos que Tribunales cedió terreno para que los colectivos doblen bien", acotó un vecino. Lo que es una señal de que seguirán transitando por allí.
Es que no obtienen respuesta a ninguna de las notas presentadas desde octubre de 2016.
Los vecinos no se oponen al cambio de sentido de la calle, pero sí al tránsito público ya que todas las líneas pasan por allí y las consecuencias se hicieron sentir en las casas (varias están rajadas con grietas) y la falta de seguridad vial.
Les preocupa el embotellamiento constante de colectivos, el atropello de los choferes, principalmente cuestionan la anulación de calle Gorriti que sí tiene el ancho para su paso.
El cambio se debe a la obra de revalorización del casco histórico y en un primer momento era "temporal" aunque ahora parece que será definitivo; aunque no tienen respuesta concreta al respecto. Los vecinos recordaron que antes que se inicie la obra, dirigieron notas al municipio con la firma de los afectados y ninguna fue respondida.
Hoy esperan la respuesta del Defensor del Pueblo que quedó en expedirse sobre la situación que los aqueja.
Los vecinos proponen que la circulación sea por avenida Martiarena y regrese por avenida Italia de manera que se eviten accidentes de tránsito y dejar al hospital "San Roque" como al sanatorio privado que accedan a sus ambulancias, y a particulares a sus garajes. "En ciudades más avanzadas el transporte público no atraviesa el microcentro, con un poco de sentido común el tránsito solo es por avenidas y calle Argañaraz no es una avenida", planteó Fernando Eslinger, vecino de la zona.
"No podemos descansar tranquilos, el único día fue el jueves que no pasaron por esta calle pero después todos los días, el ruido es infernal, más la contaminación y la inseguridad", relató Leila Nasser.
Así también reclaman la falta de comunicación con los usuarios porque no les informan sobre las paradas y así los choferes por meses subieron y bajaron personas como quisieron. Y reclamaron la falta de respeto de los choferes de las unidades a peatones y autos particulares.
Otro planteo fue que en Argañaraz y Martiarena están realizando una obra porque el tránsito de colectivos destruyó esa esquina. "Ahora nos damos que Tribunales cedió terreno para que los colectivos doblen bien", acotó un vecino. Lo que es una señal de que seguirán transitando por allí.
PUBLICIDAD