El hecho, que ocurrió el miércoles y fue difundido recién en las últimas horas de ayer, sucedió cerca de las 16.30 cuando el hombre circulaba por la ruta BR-277, de la mencionada localidad fronteriza con Misiones, a bordo de su camioneta Kia, registrada en Puerto Iguazú, y acompañado por su hijo.
El empresario, ligado al turismo, fue abordado por al menos tres delincuentes vestidos de policías, que le sustrajeron unos 690 mil dólares (unos 11.730.000 pesos), un millón de pesos argentinos y alrededor de 62 mil reales (350 mil pesos), según consta en la denuncia policial.
"Suponemos que los autores del hecho sabían que la víctima había vendido esa propiedad y acababa de cobrar ese dinero, con el que llegó a Brasil. La investigación continúa pero por el momento no tenemos mayores datos sobre los malvivientes", señaló ayer a medios locales de prensa el jefe de la Policía Civil de Foz do Iguazú, Geraldo Evangelista.
Los delincuentes portaban armas, gorros y hasta placas de detectives de la fuerza de seguridad brasilera, uno de ellos se subió a la camioneta del empresario y lo obligó a conducir hasta el barrio Tres Lagoas, en uno de los accesos a la ciudad de Foz.
Las víctimas fueron liberadas cerca de una fábrica de cemento abandonada y los ladrones se llevaron la camioneta, el dinero, las billeteras y los teléfonos celulares.
El empresario es oriundo de Buenos Aires y actualmente vive en Foz, pero tiene negocios en toda la zona de la triple frontera, por lo que los investigadores suponen que hubo un entregador.
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El hecho, que ocurrió el miércoles y fue difundido recién en las últimas horas de ayer, sucedió cerca de las 16.30 cuando el hombre circulaba por la ruta BR-277, de la mencionada localidad fronteriza con Misiones, a bordo de su camioneta Kia, registrada en Puerto Iguazú, y acompañado por su hijo.
El empresario, ligado al turismo, fue abordado por al menos tres delincuentes vestidos de policías, que le sustrajeron unos 690 mil dólares (unos 11.730.000 pesos), un millón de pesos argentinos y alrededor de 62 mil reales (350 mil pesos), según consta en la denuncia policial.
"Suponemos que los autores del hecho sabían que la víctima había vendido esa propiedad y acababa de cobrar ese dinero, con el que llegó a Brasil. La investigación continúa pero por el momento no tenemos mayores datos sobre los malvivientes", señaló ayer a medios locales de prensa el jefe de la Policía Civil de Foz do Iguazú, Geraldo Evangelista.
Los delincuentes portaban armas, gorros y hasta placas de detectives de la fuerza de seguridad brasilera, uno de ellos se subió a la camioneta del empresario y lo obligó a conducir hasta el barrio Tres Lagoas, en uno de los accesos a la ciudad de Foz.
Las víctimas fueron liberadas cerca de una fábrica de cemento abandonada y los ladrones se llevaron la camioneta, el dinero, las billeteras y los teléfonos celulares.
El empresario es oriundo de Buenos Aires y actualmente vive en Foz, pero tiene negocios en toda la zona de la triple frontera, por lo que los investigadores suponen que hubo un entregador.