Una paciente en espera y otra a quien le salvaron la vida con el trasplante hepático, buscan crear conciencia sobre la donación de órganos, en el marco del Día Nacional que se conmemoró ayer. La Fundación "Sayani" las contiene, promueve la donación y plantea su importancia para buena parte de los pacientes con enfermedades hepáticas.
Es el caso de Elsa Cardozo, paciente en lista de trasplante hepático, por cirrosis hepática causada por virus de hepatitis C, que está en tratamiento. Espera pacientemente el llamado que le otorgue la posibilidad de tener un trasplante hepático.
"El 30 de mayo es el Día Nacional de la Donación de Órganos y nosotros queremos hacer hincapié y remarcar desde la Fundación Sayani la importancia de ser donante. Si no hay donantes no hay trasplante", explicó la médica hepatóloga e integrante del Grupo de Trasplante Hepático del hospital "Argerich" de Buenos Aires, Patricia Gallardo.
"Sayani", nombre de origen quechua, significa "yo me mantengo en pie", "renacer", que asocian al estado al que se llega tras el trasplante de órganos que supone otra oportunidad.
En el caso de Cristina Luera pudo contar la experiencia de su nueva vida, que comenzó el 20 de julio de 2013 en el Día del amigo, en que casualmente recibió el órgano donado que le permitió vivir. Es que si bien no tenía ningún factor de riesgo, inició un tratamiento para tuberculosis y por la toxicidad de las drogas tuvo una falla hepática fulminante, con lo cual debió ser derivaba a la Fundación "Favaloro" en Buenos Aires donde fue transplantada.
Por ello ponderaron la importancia de la donación de órganos, que en este caso es de hígado al tratarse de enfermedades hepáticas.
Son 29 los pacientes jujeños en lista de espera para trasplante hepático, mientras que los trasplantes fueron 47 en 2015, según datos del CucaiJuy (Centro Unico Coordinador de Ablación e Implante de Jujuy).
Por un lado está Elsa que está en lista de espera y por otro, Cristina quien si no hubiera habido un donante en el momento que necesitaba no podría dar su testimonio.
Entre las enfermedades hepáticas que entran en lista de espera figuran: las cirrosis hepáticas descompensadas y algunos cánceres de hígado denominados hepato-carcinoma y las fallas hepáticas fulminantes.
"La mayoría de las enfermedades hepáticas puede evolucionar hacia la fase crónica, que lleva hacia la cirrosis hepática pero pueden pasar, como el caso de Cristina que tuvo una hepato toxicidad por los medicamentos que tomaba e hizo una falla hepática fulminante, el hígado dejó de funcionar. Ésta es una causa aguda y la de Elsa una crónica que llevó años", precisó la hepatóloga.
Gallardo es una especialista jujeña, y una de las 70 médicas del país que cuenta con la certificación de la Asociación Argentina para Estudios de Enfermedades del Hígado (Aaaeh), y para realizar trasplantes, quien es la única referente en Jujuy y exintegrante del Grupo hepático del Hospital Argerich de Buenos Aires.
"Toda enfermedad hepática, ya sea en su período agudo, depende de la gravedad si deja de funcionar el hígado o una enfermedad crónica que se descompensó son indicación de trasplante hepático, y es una oportunidad de vida", afirmó recordando que Jujuy tiene una de las más altas tasas de trasplante hepático.
La médica explicó que no hay estadísticas oficiales pero en Argentina se estima que la incidencia es de 1.4 % al 2 %, aunque hay regiones en el país con mayor porcentaje, mientras en Jujuy estaría alrededor del 1.4 %, siendo de mayor incidencia de hepatitis B en el Ramal.
Para ser donante se puede contactar el 0800 555 4628 del Incucai o a CucaiJuy (0388) 4221228.
Es el caso de Elsa Cardozo, paciente en lista de trasplante hepático, por cirrosis hepática causada por virus de hepatitis C, que está en tratamiento. Espera pacientemente el llamado que le otorgue la posibilidad de tener un trasplante hepático.
"El 30 de mayo es el Día Nacional de la Donación de Órganos y nosotros queremos hacer hincapié y remarcar desde la Fundación Sayani la importancia de ser donante. Si no hay donantes no hay trasplante", explicó la médica hepatóloga e integrante del Grupo de Trasplante Hepático del hospital "Argerich" de Buenos Aires, Patricia Gallardo.
"Sayani", nombre de origen quechua, significa "yo me mantengo en pie", "renacer", que asocian al estado al que se llega tras el trasplante de órganos que supone otra oportunidad.
En el caso de Cristina Luera pudo contar la experiencia de su nueva vida, que comenzó el 20 de julio de 2013 en el Día del amigo, en que casualmente recibió el órgano donado que le permitió vivir. Es que si bien no tenía ningún factor de riesgo, inició un tratamiento para tuberculosis y por la toxicidad de las drogas tuvo una falla hepática fulminante, con lo cual debió ser derivaba a la Fundación "Favaloro" en Buenos Aires donde fue transplantada.
Por ello ponderaron la importancia de la donación de órganos, que en este caso es de hígado al tratarse de enfermedades hepáticas.
Son 29 los pacientes jujeños en lista de espera para trasplante hepático, mientras que los trasplantes fueron 47 en 2015, según datos del CucaiJuy (Centro Unico Coordinador de Ablación e Implante de Jujuy).
Por un lado está Elsa que está en lista de espera y por otro, Cristina quien si no hubiera habido un donante en el momento que necesitaba no podría dar su testimonio.
Entre las enfermedades hepáticas que entran en lista de espera figuran: las cirrosis hepáticas descompensadas y algunos cánceres de hígado denominados hepato-carcinoma y las fallas hepáticas fulminantes.
"La mayoría de las enfermedades hepáticas puede evolucionar hacia la fase crónica, que lleva hacia la cirrosis hepática pero pueden pasar, como el caso de Cristina que tuvo una hepato toxicidad por los medicamentos que tomaba e hizo una falla hepática fulminante, el hígado dejó de funcionar. Ésta es una causa aguda y la de Elsa una crónica que llevó años", precisó la hepatóloga.
Gallardo es una especialista jujeña, y una de las 70 médicas del país que cuenta con la certificación de la Asociación Argentina para Estudios de Enfermedades del Hígado (Aaaeh), y para realizar trasplantes, quien es la única referente en Jujuy y exintegrante del Grupo hepático del Hospital Argerich de Buenos Aires.
"Toda enfermedad hepática, ya sea en su período agudo, depende de la gravedad si deja de funcionar el hígado o una enfermedad crónica que se descompensó son indicación de trasplante hepático, y es una oportunidad de vida", afirmó recordando que Jujuy tiene una de las más altas tasas de trasplante hepático.
La médica explicó que no hay estadísticas oficiales pero en Argentina se estima que la incidencia es de 1.4 % al 2 %, aunque hay regiones en el país con mayor porcentaje, mientras en Jujuy estaría alrededor del 1.4 %, siendo de mayor incidencia de hepatitis B en el Ramal.
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Una paciente en espera y otra a quien le salvaron la vida con el trasplante hepático, buscan crear conciencia sobre la donación de órganos, en el marco del Día Nacional que se conmemoró ayer. La Fundación "Sayani" las contiene, promueve la donación y plantea su importancia para buena parte de los pacientes con enfermedades hepáticas.
Es el caso de Elsa Cardozo, paciente en lista de trasplante hepático, por cirrosis hepática causada por virus de hepatitis C, que está en tratamiento. Espera pacientemente el llamado que le otorgue la posibilidad de tener un trasplante hepático.
"El 30 de mayo es el Día Nacional de la Donación de Órganos y nosotros queremos hacer hincapié y remarcar desde la Fundación Sayani la importancia de ser donante. Si no hay donantes no hay trasplante", explicó la médica hepatóloga e integrante del Grupo de Trasplante Hepático del hospital "Argerich" de Buenos Aires, Patricia Gallardo.
"Sayani", nombre de origen quechua, significa "yo me mantengo en pie", "renacer", que asocian al estado al que se llega tras el trasplante de órganos que supone otra oportunidad.
En el caso de Cristina Luera pudo contar la experiencia de su nueva vida, que comenzó el 20 de julio de 2013 en el Día del amigo, en que casualmente recibió el órgano donado que le permitió vivir. Es que si bien no tenía ningún factor de riesgo, inició un tratamiento para tuberculosis y por la toxicidad de las drogas tuvo una falla hepática fulminante, con lo cual debió ser derivaba a la Fundación "Favaloro" en Buenos Aires donde fue transplantada.
Por ello ponderaron la importancia de la donación de órganos, que en este caso es de hígado al tratarse de enfermedades hepáticas.
Son 29 los pacientes jujeños en lista de espera para trasplante hepático, mientras que los trasplantes fueron 47 en 2015, según datos del CucaiJuy (Centro Unico Coordinador de Ablación e Implante de Jujuy).
Por un lado está Elsa que está en lista de espera y por otro, Cristina quien si no hubiera habido un donante en el momento que necesitaba no podría dar su testimonio.
Entre las enfermedades hepáticas que entran en lista de espera figuran: las cirrosis hepáticas descompensadas y algunos cánceres de hígado denominados hepato-carcinoma y las fallas hepáticas fulminantes.
"La mayoría de las enfermedades hepáticas puede evolucionar hacia la fase crónica, que lleva hacia la cirrosis hepática pero pueden pasar, como el caso de Cristina que tuvo una hepato toxicidad por los medicamentos que tomaba e hizo una falla hepática fulminante, el hígado dejó de funcionar. Ésta es una causa aguda y la de Elsa una crónica que llevó años", precisó la hepatóloga.
Gallardo es una especialista jujeña, y una de las 70 médicas del país que cuenta con la certificación de la Asociación Argentina para Estudios de Enfermedades del Hígado (Aaaeh), y para realizar trasplantes, quien es la única referente en Jujuy y exintegrante del Grupo hepático del Hospital Argerich de Buenos Aires.
"Toda enfermedad hepática, ya sea en su período agudo, depende de la gravedad si deja de funcionar el hígado o una enfermedad crónica que se descompensó son indicación de trasplante hepático, y es una oportunidad de vida", afirmó recordando que Jujuy tiene una de las más altas tasas de trasplante hepático.
La médica explicó que no hay estadísticas oficiales pero en Argentina se estima que la incidencia es de 1.4 % al 2 %, aunque hay regiones en el país con mayor porcentaje, mientras en Jujuy estaría alrededor del 1.4 %, siendo de mayor incidencia de hepatitis B en el Ramal.
Para ser donante se puede contactar el 0800 555 4628 del Incucai o a CucaiJuy (0388) 4221228.
Es el caso de Elsa Cardozo, paciente en lista de trasplante hepático, por cirrosis hepática causada por virus de hepatitis C, que está en tratamiento. Espera pacientemente el llamado que le otorgue la posibilidad de tener un trasplante hepático.
"El 30 de mayo es el Día Nacional de la Donación de Órganos y nosotros queremos hacer hincapié y remarcar desde la Fundación Sayani la importancia de ser donante. Si no hay donantes no hay trasplante", explicó la médica hepatóloga e integrante del Grupo de Trasplante Hepático del hospital "Argerich" de Buenos Aires, Patricia Gallardo.
"Sayani", nombre de origen quechua, significa "yo me mantengo en pie", "renacer", que asocian al estado al que se llega tras el trasplante de órganos que supone otra oportunidad.
En el caso de Cristina Luera pudo contar la experiencia de su nueva vida, que comenzó el 20 de julio de 2013 en el Día del amigo, en que casualmente recibió el órgano donado que le permitió vivir. Es que si bien no tenía ningún factor de riesgo, inició un tratamiento para tuberculosis y por la toxicidad de las drogas tuvo una falla hepática fulminante, con lo cual debió ser derivaba a la Fundación "Favaloro" en Buenos Aires donde fue transplantada.
Por ello ponderaron la importancia de la donación de órganos, que en este caso es de hígado al tratarse de enfermedades hepáticas.
Son 29 los pacientes jujeños en lista de espera para trasplante hepático, mientras que los trasplantes fueron 47 en 2015, según datos del CucaiJuy (Centro Unico Coordinador de Ablación e Implante de Jujuy).
Por un lado está Elsa que está en lista de espera y por otro, Cristina quien si no hubiera habido un donante en el momento que necesitaba no podría dar su testimonio.
Entre las enfermedades hepáticas que entran en lista de espera figuran: las cirrosis hepáticas descompensadas y algunos cánceres de hígado denominados hepato-carcinoma y las fallas hepáticas fulminantes.
"La mayoría de las enfermedades hepáticas puede evolucionar hacia la fase crónica, que lleva hacia la cirrosis hepática pero pueden pasar, como el caso de Cristina que tuvo una hepato toxicidad por los medicamentos que tomaba e hizo una falla hepática fulminante, el hígado dejó de funcionar. Ésta es una causa aguda y la de Elsa una crónica que llevó años", precisó la hepatóloga.
Gallardo es una especialista jujeña, y una de las 70 médicas del país que cuenta con la certificación de la Asociación Argentina para Estudios de Enfermedades del Hígado (Aaaeh), y para realizar trasplantes, quien es la única referente en Jujuy y exintegrante del Grupo hepático del Hospital Argerich de Buenos Aires.
"Toda enfermedad hepática, ya sea en su período agudo, depende de la gravedad si deja de funcionar el hígado o una enfermedad crónica que se descompensó son indicación de trasplante hepático, y es una oportunidad de vida", afirmó recordando que Jujuy tiene una de las más altas tasas de trasplante hepático.
La médica explicó que no hay estadísticas oficiales pero en Argentina se estima que la incidencia es de 1.4 % al 2 %, aunque hay regiones en el país con mayor porcentaje, mientras en Jujuy estaría alrededor del 1.4 %, siendo de mayor incidencia de hepatitis B en el Ramal.
Para ser donante se puede contactar el 0800 555 4628 del Incucai o a CucaiJuy (0388) 4221228.
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