El secretario general de la ONU,
Ban Ki-moon, reclamó ayer extender la tregua parcial en vigor en algunas zonas de
Siria a todo el país, especialmente en
Alepo, la mayor ciudad del norte de Siria, escenario de bombardeos continuados en los últimos días.
"El secretario general está profundamente preocupado por la peligrosa escalada de la lucha en Alepo y sus alrededores y el sufrimiento intolerable (...) que está causando entre los civiles", expresó Naciones Unidas en un comunicado.
Ban llamó en la nota a todos los actores internacionales -principalmente a Rusia y Estados Unidos- a "redoblar sus esfuerzos para ayudar a las partes sirias" a retomar ese alto el fuego en todo el territorio. En ese sentido, Ban pidió que el renovado cese de hostilidades puesto en marcha en las provincias de Damasco y Latakia se extienda "a otras partes de Siria, con especial urgencia para Alepo".
En la última semana, en esta ciudad del norte sirio sufrió una escalada de violencia que dejó al menos 244 muertos pese al alto el fuego declarado en febrero, según cifras del Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
"El colapso del cese de hostilidades sólo traerá más violencia, muerte y destrucción a la vez que debilitará los esfuerzos para encontrar una solución negociada a esta brutal guerra", remarcó Ban.
El secretario general de la ONU,
Ban Ki-moon, reclamó ayer extender la tregua parcial en vigor en algunas zonas de
Siria a todo el país, especialmente en
Alepo, la mayor ciudad del norte de Siria, escenario de bombardeos continuados en los últimos días.
"El secretario general está profundamente preocupado por la peligrosa escalada de la lucha en Alepo y sus alrededores y el sufrimiento intolerable (...) que está causando entre los civiles", expresó Naciones Unidas en un comunicado.
Ban llamó en la nota a todos los actores internacionales -principalmente a Rusia y Estados Unidos- a "redoblar sus esfuerzos para ayudar a las partes sirias" a retomar ese alto el fuego en todo el territorio. En ese sentido, Ban pidió que el renovado cese de hostilidades puesto en marcha en las provincias de Damasco y Latakia se extienda "a otras partes de Siria, con especial urgencia para Alepo".
En la última semana, en esta ciudad del norte sirio sufrió una escalada de violencia que dejó al menos 244 muertos pese al alto el fuego declarado en febrero, según cifras del Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
"El colapso del cese de hostilidades sólo traerá más violencia, muerte y destrucción a la vez que debilitará los esfuerzos para encontrar una solución negociada a esta brutal guerra", remarcó Ban.