Bélgica desmanteló, con la ayuda de las autoridades británicas, una red de traficantes de personas sospechosas de haber hecho pasar ilegalmente a centenares, incluso miles, de migrantes hacia Gran Bretaña utilizando camiones, indicó el lunes a los medios de comunicación local la policía belga.
Esta red, compuesta de kurdos oriundos de Irak, estuvo activa al menos desde el mes de mayo de 2015 y hasta fines de noviembre, según afirma el mismo comunicado que se dio a conocer tras el éxito de un operativo para desarmar una red de traficantes de personas, la cual era investigada desde hace un tiempo.
"La banda operaba con gran regularidad -casi diaria- y hacía pasar una cantidad importante de personas, incluso hasta 20 por noche, es decir unos centenares cada mes", precisó la policía.
Según la misma fuente, las personas debían pagar hasta 2 mil euros a los traficantes para cruzar el Canal de la Mancha.
La banda operaba con gran regularidad y hacía pasar una cantidad importante de personas, incluso hasta 20 por noche.
El diario belga De Standaard estima son 3 mil los migrantes que ingresaron ilegalmente en Gran Bretaña. Una cifra que la fiscalía de Gante (norte), a cargo de la investigación, no puede confirmar pero que parece "plausible", según explicó su portavoz, Eva Brantegem, a la prensa local.
La red de trata hacía subir a los migrantes a los remolques de los camiones cuando se encontraban por la noche aparcados a la vera de las autopistas cerca de Bruselas y entre Amberes y Gante.
Esto sucedía sin que los conductores de los camiones estuviesen al tanto y amenazando en casos la integridad física de los migrantes que debían subir en ocasiones a camiones frigoríficos, según la policía.
Entre el 22 de mayo y el 25 de noviembre, diez hombres sospechosos de ser miembros clave de la organización criminal fueron detenidos en Bélgica. Se trata de kurdos oriundos de Irak de entre 26 y 41 años de edad. Dos había presentado una solicitud de asilo en Bélgica y los otros residían ilegalmente en el reino, según trascendió.
Todos fueron inculpados y detenidos.
En Gran Bretaña, otros dos sospechosos que también pidieron asilo en ese país fueron detenidos el 7 de enero. Bélgica reclamó su extradición.
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Bélgica desmanteló, con la ayuda de las autoridades británicas, una red de traficantes de personas sospechosas de haber hecho pasar ilegalmente a centenares, incluso miles, de migrantes hacia Gran Bretaña utilizando camiones, indicó el lunes a los medios de comunicación local la policía belga.
Esta red, compuesta de kurdos oriundos de Irak, estuvo activa al menos desde el mes de mayo de 2015 y hasta fines de noviembre, según afirma el mismo comunicado que se dio a conocer tras el éxito de un operativo para desarmar una red de traficantes de personas, la cual era investigada desde hace un tiempo.
"La banda operaba con gran regularidad -casi diaria- y hacía pasar una cantidad importante de personas, incluso hasta 20 por noche, es decir unos centenares cada mes", precisó la policía.
Según la misma fuente, las personas debían pagar hasta 2 mil euros a los traficantes para cruzar el Canal de la Mancha.
La banda operaba con gran regularidad y hacía pasar una cantidad importante de personas, incluso hasta 20 por noche.
El diario belga De Standaard estima son 3 mil los migrantes que ingresaron ilegalmente en Gran Bretaña. Una cifra que la fiscalía de Gante (norte), a cargo de la investigación, no puede confirmar pero que parece "plausible", según explicó su portavoz, Eva Brantegem, a la prensa local.
La red de trata hacía subir a los migrantes a los remolques de los camiones cuando se encontraban por la noche aparcados a la vera de las autopistas cerca de Bruselas y entre Amberes y Gante.
Esto sucedía sin que los conductores de los camiones estuviesen al tanto y amenazando en casos la integridad física de los migrantes que debían subir en ocasiones a camiones frigoríficos, según la policía.
Entre el 22 de mayo y el 25 de noviembre, diez hombres sospechosos de ser miembros clave de la organización criminal fueron detenidos en Bélgica. Se trata de kurdos oriundos de Irak de entre 26 y 41 años de edad. Dos había presentado una solicitud de asilo en Bélgica y los otros residían ilegalmente en el reino, según trascendió.
Todos fueron inculpados y detenidos.
En Gran Bretaña, otros dos sospechosos que también pidieron asilo en ese país fueron detenidos el 7 de enero. Bélgica reclamó su extradición.
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