La mañana del 13 de junio, día de San Antonio de Padua, se vistió de sol y de fiesta en la localidad homónima de los Valles para recibir a la feligresía de la provincia.
inicia sesión o regístrate.
La mañana del 13 de junio, día de San Antonio de Padua, se vistió de sol y de fiesta en la localidad homónima de los Valles para recibir a la feligresía de la provincia.
Los actos litúrgicos dieron inicio desde horas tempranas con la misa del peregrino, mientras que a las 10 se llevó a cabo la misa central.
En su mensaje el obispo Daniel Fernández pidió que “la intercesión de San Antonio, hermoso ejemplo y fiel discípulo de Jesús, un predicador que vivió con la palabra de Jesús nos ayude a todos a encarnar en nuestro tiempo, en nuestra época, en nuestro lugar, esa vida de amor que vino a traer Jesús a la tierra y que a través de los santos sepamos que es posible vivir mejor”. Asimismo puntualizó que “nos demuestra que es posible alcanzar lo mejor que Dios espera de cada uno de nosotros”.
El prelado instó a “animarnos todos a que cada día que pase sea un poquito mejor. San Antonio "nos tira el guante’ y nos dice "ustedes háganse cargo de su tiempo, de su historia y de su momento con las mismas armas: con el Evangelio, con la Palabra de Dios y con la certeza que Dios está a nuestro lado. Así los santos pudieron hacer grandes cosas y así nosotros tenemos que estar a su altura”.
Luego se realizó la procesión con la presencia del obispo, el padre Carlos Arnaud y autoridades locales.
Las actividades recreativas y culturales continuaron durante toda la jornada.