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Para conocer mejor nuestra Biblioteca Popular

Lunes, 02 de marzo de 2015 00:00
De tanto en tanto es bueno recordar que tenemos lugares en nuestra provincia, que son de vital importancia y de gran riqueza patrimonial. Y sobre todo que están a disposición de todos.
El Tribuno de Jujuy habló con la presidenta de la Biblioteca Popular de Jujuy, Silvia Rey Campero para conocer detalles de lo que serán algunas de las acciones previstas para este año, quien además de mostrarnos con una visita guiada los distintos sectores de la institución para que el público en general sepa de qué dispone, nos explicó que entre otras cosas, están gestionando recursos y apoyos para poder ampliar el edificio hacia un terreno que tiene disponible el inmueble.
Rey Campero está en la presidencia desde junio del año pasado. Recibió esta responsabilidad de manos de la profesora Ana María Berbel, quien estuvo al frente de la biblioteca durante veinte años, llevando adelante una gestión impecable.
"Yo era vicepresidenta de Ana María (Berbel), y antes había sido vocal de la comisión directiva, es decir que siempre estuve cerca de la biblioteca", comenta.
Con respecto a su forma de trabajo explicó que al trabajo que hizo Berbel, que calificó de excelente, pretende simplemente seguir aportando ideas, y por supuesto continuar con todo lo que estaba bien.
En primer lugar nos adelantó que una de las ideas nuevas que propone para trabajar en la biblioteca es la realización de exposiciones temáticas de libros, de acuerdo a fechas especiales. La primera de este año será la exposición ideada para Semana Santa, dedicada a libros religiosos, ya sean biblias de distintos tiempos, obras sobre la vida de los santos, etc.
Para esto es necesario "un arduo trabajo de investigación, selección y adecuación de los ejemplares", explicó. La intención es poder mostrar a la sociedad el valioso material del que dispone en la biblioteca. Por ejemplo mencionó una biblia del 1700 y un libro sobre la vida de Santa Teresa de Jesús de la misma época, donados por una ciudadana hace un par de años.
La biblia tiene los bordes de páginas de oro, y la tapa está realizada en cuero con incrustaciones de piedras y metales. Es una joya que los jujeños merecen conocer.
Ya el año pasado, en el mes de octubre, Rey Campero realizó una primera exposición temática con este sentido, relacionada con ediciones de libros antiguas. En la oportunidad se vieron por ejemplo la obra "La quinua: su cultivo en los altiplanos" de Horacio Carrillo, del año 1927; "Jujui. Provincia Federal Argentina. Apuntes de su historia" de Joaquín Carrillo, del año 1958 (1877); "Puya puya" de Domingo Zerpa, del año 1932; los tres tomos del "Archivo Capitular de Jujuy" de Ricardo Rojas (Tomo I 1913, Tomo II 1913, y Tomo III 1941); "Primer Censo de la República Argentina" de 1872; "Escritos póstumos. Estudios económicos" de Juan Bautista Alberdi, de 1895; por mencionar solo algunos.
"Fundamentalmente, mi idea es, que como se trata de una biblioteca popular, su tarea principal sea el servicio. Tenemos que ser un centro de divulgación del conocimiento, y el lugar al que puedan venir los chicos preescolares, universitarios, profesionales de posgrado, y público en general, y que encuentren acá su lugar, el material que buscan, y el espacio de paz que brinda esta casa", comentó.
"Muchas personas vienen a leer un libro en este lugar en vez de ir a un confitería porque encuentran más tranquilidad. Por otro lado, los chicos de primario y secundario encuentran una ayuda para sus tareas, porque vienen a consultar y nosotros tenemos gente capacitada para que los oriente, les muestre los libros y los ayuda a hacer las tareas", continuó. "A veces los niños o adolescentes no tienen espacio en sus casas para estudiar o viven lejos y vienen a la biblioteca a aprovechar el tiempo para no tener que ir y volver a la tarde", cuenta.
Actualmente se está trabajando también en la creación de un sistema informático propio de la institución, que contenga todo el material disponible, los datos de los socios, y el estado de cada ejemplar que sirva los encargados que están en atención al público. "Se van a poder consultar datos de si está un libro, si no está, quién se lo llevó, cuándo lo tiene que devolver, cuántos ejemplares hay de ese libro, etc.", nos explicó la ingeniera Luciana Chañi Coca, quien está diseñando este programa.
Silvia Rey Campero, entiende que la biblioteca "si bien es un lugar sagrado y un templo del saber, es bueno que tengamos cosas hermosas y valiosas bien cuidadas, pero si no están a disposición de las personas que lo vayan a necesitar, no sirve porque no se trata de atesorar material para nosotros nomás".
Más socios
Con respecto a los recursos con los que cuenta la biblioteca para mantener el edificio y sus libros, Rey Campero explicó que además de la Conabip (Comisión Nacional de Bibliotecas Populares), cuentan eventualmente con la ayuda del Gobierno de la Provincia y de la Municipalidad de San Salvador de Jujuy.
Sin embargo no es suficiente, por lo que otro de los objetivos de este año, es sumar socios a la biblioteca. A pesar de que la cuota mensual es muy baja, ($30), explicó que se decidió no aumentar el monto este año, justamente para que siga siendo accesible a todos. También se está pensando en implementar una categoría especial de socios que realicen un solo apoyo anual.
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De tanto en tanto es bueno recordar que tenemos lugares en nuestra provincia, que son de vital importancia y de gran riqueza patrimonial. Y sobre todo que están a disposición de todos.
El Tribuno de Jujuy habló con la presidenta de la Biblioteca Popular de Jujuy, Silvia Rey Campero para conocer detalles de lo que serán algunas de las acciones previstas para este año, quien además de mostrarnos con una visita guiada los distintos sectores de la institución para que el público en general sepa de qué dispone, nos explicó que entre otras cosas, están gestionando recursos y apoyos para poder ampliar el edificio hacia un terreno que tiene disponible el inmueble.
Rey Campero está en la presidencia desde junio del año pasado. Recibió esta responsabilidad de manos de la profesora Ana María Berbel, quien estuvo al frente de la biblioteca durante veinte años, llevando adelante una gestión impecable.
"Yo era vicepresidenta de Ana María (Berbel), y antes había sido vocal de la comisión directiva, es decir que siempre estuve cerca de la biblioteca", comenta.
Con respecto a su forma de trabajo explicó que al trabajo que hizo Berbel, que calificó de excelente, pretende simplemente seguir aportando ideas, y por supuesto continuar con todo lo que estaba bien.
En primer lugar nos adelantó que una de las ideas nuevas que propone para trabajar en la biblioteca es la realización de exposiciones temáticas de libros, de acuerdo a fechas especiales. La primera de este año será la exposición ideada para Semana Santa, dedicada a libros religiosos, ya sean biblias de distintos tiempos, obras sobre la vida de los santos, etc.
Para esto es necesario "un arduo trabajo de investigación, selección y adecuación de los ejemplares", explicó. La intención es poder mostrar a la sociedad el valioso material del que dispone en la biblioteca. Por ejemplo mencionó una biblia del 1700 y un libro sobre la vida de Santa Teresa de Jesús de la misma época, donados por una ciudadana hace un par de años.
La biblia tiene los bordes de páginas de oro, y la tapa está realizada en cuero con incrustaciones de piedras y metales. Es una joya que los jujeños merecen conocer.
Ya el año pasado, en el mes de octubre, Rey Campero realizó una primera exposición temática con este sentido, relacionada con ediciones de libros antiguas. En la oportunidad se vieron por ejemplo la obra "La quinua: su cultivo en los altiplanos" de Horacio Carrillo, del año 1927; "Jujui. Provincia Federal Argentina. Apuntes de su historia" de Joaquín Carrillo, del año 1958 (1877); "Puya puya" de Domingo Zerpa, del año 1932; los tres tomos del "Archivo Capitular de Jujuy" de Ricardo Rojas (Tomo I 1913, Tomo II 1913, y Tomo III 1941); "Primer Censo de la República Argentina" de 1872; "Escritos póstumos. Estudios económicos" de Juan Bautista Alberdi, de 1895; por mencionar solo algunos.
"Fundamentalmente, mi idea es, que como se trata de una biblioteca popular, su tarea principal sea el servicio. Tenemos que ser un centro de divulgación del conocimiento, y el lugar al que puedan venir los chicos preescolares, universitarios, profesionales de posgrado, y público en general, y que encuentren acá su lugar, el material que buscan, y el espacio de paz que brinda esta casa", comentó.
"Muchas personas vienen a leer un libro en este lugar en vez de ir a un confitería porque encuentran más tranquilidad. Por otro lado, los chicos de primario y secundario encuentran una ayuda para sus tareas, porque vienen a consultar y nosotros tenemos gente capacitada para que los oriente, les muestre los libros y los ayuda a hacer las tareas", continuó. "A veces los niños o adolescentes no tienen espacio en sus casas para estudiar o viven lejos y vienen a la biblioteca a aprovechar el tiempo para no tener que ir y volver a la tarde", cuenta.
Actualmente se está trabajando también en la creación de un sistema informático propio de la institución, que contenga todo el material disponible, los datos de los socios, y el estado de cada ejemplar que sirva los encargados que están en atención al público. "Se van a poder consultar datos de si está un libro, si no está, quién se lo llevó, cuándo lo tiene que devolver, cuántos ejemplares hay de ese libro, etc.", nos explicó la ingeniera Luciana Chañi Coca, quien está diseñando este programa.
Silvia Rey Campero, entiende que la biblioteca "si bien es un lugar sagrado y un templo del saber, es bueno que tengamos cosas hermosas y valiosas bien cuidadas, pero si no están a disposición de las personas que lo vayan a necesitar, no sirve porque no se trata de atesorar material para nosotros nomás".
Más socios
Con respecto a los recursos con los que cuenta la biblioteca para mantener el edificio y sus libros, Rey Campero explicó que además de la Conabip (Comisión Nacional de Bibliotecas Populares), cuentan eventualmente con la ayuda del Gobierno de la Provincia y de la Municipalidad de San Salvador de Jujuy.
Sin embargo no es suficiente, por lo que otro de los objetivos de este año, es sumar socios a la biblioteca. A pesar de que la cuota mensual es muy baja, ($30), explicó que se decidió no aumentar el monto este año, justamente para que siga siendo accesible a todos. También se está pensando en implementar una categoría especial de socios que realicen un solo apoyo anual.

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