El exjugador de Inter de Italia, Daniel Osvaldo ya pasó la revisación médica y se apresta a firmar su contrato, que lo convertirá en el décimo refuerzo del club para la próxima campaña.
El delantero dijo "estoy contento y también nervioso, todavía no firmé mi contrato y por cábala no quiero decir nada. Si sale todo bien, como espero, es el sueño más grande de mi vida".
El atacante, de 29 años, arribó al país procedente de Milán con escala en Madrid.
En las próximas horas sería presentado en Boca, que lo contratará a préstamo por seis meses con opción a una prórroga por 60 días.
"Sé lo que es la gente, hasta hace unas horas me tocaba estar del otro lado, con los de la tribuna, así que sé muy bien lo que significa vestir esta camiseta", añadió el atacante, quien jugó anteriormente en 10 clubes, en los que anotó 75 goles en 235 partidos.
Osvaldo, un trotamundos del fútbol, comenzó su carrera en Huracán, luego se marchó a Europa para jugar en Atalanta, Lecce y Fiorentina, todos de Italia, Espanyol de Barcelona, Southampton de Inglaterra y Juventus e Inter, otra vez en Italia.
Además, el delantero posee la doble ciudadanía italiana y por esa razón vistió la camiseta del seleccionado "azzurro" en 14 ocasiones.
"Hace 20 días que no entreno con el grupo, así que espero ponerme en forma rápido. Mi familia y amigos están felices con esta llegada a Boca, sólo espero tranquilizarme cuando me toque entrar a la Bombonera", destacó Osvaldo.
Su llegada a Boca, club del que es hincha confeso, se gestionó durante los últimos días, debido a que mantuvo una discusión con el DT de Inter, Roberto Mancini, a raíz de la cual el club milanés decidió sacarlo de la nómina oficial del plantel para lo que resta de la temporada.
Además, Inter contrató al suizo Xherdan Shaqiri para el mismo puesto y directamente lo excluyó del equipo, de manera que se iba a quedar sin club.
El incidente se originó el mes pasado, en el empate entre Inter y Juventus (1-1), cuando mantuvo una discusión en pleno partido con su compatriota Mauro Icardi, a quien le recriminó no haberle pasado la pelota en una clara jugada de gol, en un reclamo airado que comenzó dentro de la cancha y siguió en el vestuario. El problema se extendió con la intervención del DT que terminó marginándolo.
"Estaba jugando bien y haciendo goles, hasta que sucedió lo que todos saben y la cosa terminó mal. Igualmente, no hay mal que por bien no venga y ahora tengo la posibilidad de cumplir el sueño que tenía de jugar en Boca", enfatizó el delantero surgido de Huracán, donde únicamente actuó en el torneo de la Primera B Nacional.
"Hace 10 años que no juego en el fútbol argentino, seguramente deberé adaptarme. Tengo claro que en Boca siempre hay que ganar todo lo que se juega y que la Libertadores es muy importante" concluyó Osvaldo, quien sin jugar ya comenzó a ganarse la simpatía de los hinchas por su "look" informal y sus declaraciones de amor hacia los colores azul y amarillo.
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El exjugador de Inter de Italia, Daniel Osvaldo ya pasó la revisación médica y se apresta a firmar su contrato, que lo convertirá en el décimo refuerzo del club para la próxima campaña.
El delantero dijo "estoy contento y también nervioso, todavía no firmé mi contrato y por cábala no quiero decir nada. Si sale todo bien, como espero, es el sueño más grande de mi vida".
El atacante, de 29 años, arribó al país procedente de Milán con escala en Madrid.
En las próximas horas sería presentado en Boca, que lo contratará a préstamo por seis meses con opción a una prórroga por 60 días.
"Sé lo que es la gente, hasta hace unas horas me tocaba estar del otro lado, con los de la tribuna, así que sé muy bien lo que significa vestir esta camiseta", añadió el atacante, quien jugó anteriormente en 10 clubes, en los que anotó 75 goles en 235 partidos.
Osvaldo, un trotamundos del fútbol, comenzó su carrera en Huracán, luego se marchó a Europa para jugar en Atalanta, Lecce y Fiorentina, todos de Italia, Espanyol de Barcelona, Southampton de Inglaterra y Juventus e Inter, otra vez en Italia.
Además, el delantero posee la doble ciudadanía italiana y por esa razón vistió la camiseta del seleccionado "azzurro" en 14 ocasiones.
"Hace 20 días que no entreno con el grupo, así que espero ponerme en forma rápido. Mi familia y amigos están felices con esta llegada a Boca, sólo espero tranquilizarme cuando me toque entrar a la Bombonera", destacó Osvaldo.
Su llegada a Boca, club del que es hincha confeso, se gestionó durante los últimos días, debido a que mantuvo una discusión con el DT de Inter, Roberto Mancini, a raíz de la cual el club milanés decidió sacarlo de la nómina oficial del plantel para lo que resta de la temporada.
Además, Inter contrató al suizo Xherdan Shaqiri para el mismo puesto y directamente lo excluyó del equipo, de manera que se iba a quedar sin club.
El incidente se originó el mes pasado, en el empate entre Inter y Juventus (1-1), cuando mantuvo una discusión en pleno partido con su compatriota Mauro Icardi, a quien le recriminó no haberle pasado la pelota en una clara jugada de gol, en un reclamo airado que comenzó dentro de la cancha y siguió en el vestuario. El problema se extendió con la intervención del DT que terminó marginándolo.
"Estaba jugando bien y haciendo goles, hasta que sucedió lo que todos saben y la cosa terminó mal. Igualmente, no hay mal que por bien no venga y ahora tengo la posibilidad de cumplir el sueño que tenía de jugar en Boca", enfatizó el delantero surgido de Huracán, donde únicamente actuó en el torneo de la Primera B Nacional.
"Hace 10 años que no juego en el fútbol argentino, seguramente deberé adaptarme. Tengo claro que en Boca siempre hay que ganar todo lo que se juega y que la Libertadores es muy importante" concluyó Osvaldo, quien sin jugar ya comenzó a ganarse la simpatía de los hinchas por su "look" informal y sus declaraciones de amor hacia los colores azul y amarillo.
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