Devora Elina Rivero, mujer que llegó a juicio acusada de ser la responsable de la muerte de su novio Jorge Martínez, en un hecho ocurrido el 7 de diciembre de 2013 en la ciudad de Perico, fue absuelta por el "beneficio de la duda".
Así lo resolvió el Tribunal en lo Criminal Nº 2, luego de haberse producido los alegatos, donde la exposición oral de la fiscal Liliana Montiel fue determinante para la suerte de la imputada.
Montiel había comenzado diciendo que ninguna de las pruebas testimoniales recepcionadas la situaban en el lugar de los hechos a "Eli", es decir que nadie la vio a esa hora, ni mucho menos disparar.
Además apuntó a los policías que intervinieron en la investigación. "Hubo errores graves que no se corrigieron a tiempo", dijo.
Luego se refirió a las conversaciones que "Eli" Rivero mantuvo no solo con su novio, sino con una persona de nombre Ariel. "Se registraron varios mensajes de textos y llamados. Aquí es donde se produjo una grave falencia en cuanto a la investigación. Resulta que el fiscal había solicitado el registro de llamadas del celular de "Eli", este recién fue entregado el 30 de marzo, es decir después de tres meses y medio. A esa altura, los números que habían tenido contacto con la imputada podrían haber sido deshechos, pero tampoco fueron investigados", dijo la fiscal. Además los registros no cambiaron de antena, pero esto se debe a que el radio donde ocurrió el hecho y la casa de la imputada eran próximos en cuanto a la distancia.
Otro error en la investigación que mencionó la fiscal es el tiempo que no coincide entre las llamadas efectuadas o recibidas del teléfono de "Eli", y los mensajes de avisos de llamadas perdidas de los mismos. Esto tiene que ver con una mala transcripción por parte de un efectivo policial que estuvo a cargo.
Es decir que la fiscal encontró "más dudas que certezas en cuanto a la calificación legal que llegó a juicio Rivero y los elementos probatorios no fueron suficientes para poderle atribuir el asesinato de Jorge Martínez". La mujer llegó a juicio acusada por la supuesta autoría del delito de "homicidio calificado por el vínculo y con alevosía".
Además la fiscal de sala dijo que "en la requisitoria fiscal se mal interpretó el informe del Cuerpo de Investigaciones Fiscales de la provincia de Salta, donde el resultado del barrido electrónico que se le hizo a una prenda de vestir que usó en ese momento Rivero, dio no positivo", porque se hallaron partículas "consistentes"pero en distintas partes de esa prenda se halló esa partícula hasta en la "capucha" de la camiseta.
Es por eso que la fiscal Liliana Montiel había solicitado que "Eli" Rivero fuera absuelta por el beneficio de la duda, al no encontrar prueba concreta de la autoría del crimen.
Perico suma otro crimen sin resolver
Antes que se diera a conocer el fallo, la querella a cargo de Claudia Kuntz había solicitado la pena de prisión perpetua para la acusada, considerándola autora responsable del crimen de su novio. Pero los elementos probatorios no "fueron suficientes" para el Tribunal, que fue el que resolvió el fallo.
En el medio de todas las diligencias investigativas, notoriamente mal encaminadas desde un principio, quedó otro crimen sin resolver en la ciudad tabacalera. Situación que preocupa a los encargados de impartir justicia, porque no es la primera vez que un crimen queda sin ser resuelto a causa de negligencias de los efectivos policiales.
Los familiares de la víctima no encontraron "la paz que vinieron a buscar" con el fallo de este juicio, y la resolución del Tribunal enjuiciador da cuenta que una mujer estuvo detenida casi dos años sin una prueba certera que pudiera incriminarla en un homicidio.
Y tal vez nunca se sepa qué fue lo que realmente sucedió ese día.
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Devora Elina Rivero, mujer que llegó a juicio acusada de ser la responsable de la muerte de su novio Jorge Martínez, en un hecho ocurrido el 7 de diciembre de 2013 en la ciudad de Perico, fue absuelta por el "beneficio de la duda".
Así lo resolvió el Tribunal en lo Criminal Nº 2, luego de haberse producido los alegatos, donde la exposición oral de la fiscal Liliana Montiel fue determinante para la suerte de la imputada.
Montiel había comenzado diciendo que ninguna de las pruebas testimoniales recepcionadas la situaban en el lugar de los hechos a "Eli", es decir que nadie la vio a esa hora, ni mucho menos disparar.
Además apuntó a los policías que intervinieron en la investigación. "Hubo errores graves que no se corrigieron a tiempo", dijo.
Luego se refirió a las conversaciones que "Eli" Rivero mantuvo no solo con su novio, sino con una persona de nombre Ariel. "Se registraron varios mensajes de textos y llamados. Aquí es donde se produjo una grave falencia en cuanto a la investigación. Resulta que el fiscal había solicitado el registro de llamadas del celular de "Eli", este recién fue entregado el 30 de marzo, es decir después de tres meses y medio. A esa altura, los números que habían tenido contacto con la imputada podrían haber sido deshechos, pero tampoco fueron investigados", dijo la fiscal. Además los registros no cambiaron de antena, pero esto se debe a que el radio donde ocurrió el hecho y la casa de la imputada eran próximos en cuanto a la distancia.
Otro error en la investigación que mencionó la fiscal es el tiempo que no coincide entre las llamadas efectuadas o recibidas del teléfono de "Eli", y los mensajes de avisos de llamadas perdidas de los mismos. Esto tiene que ver con una mala transcripción por parte de un efectivo policial que estuvo a cargo.
Es decir que la fiscal encontró "más dudas que certezas en cuanto a la calificación legal que llegó a juicio Rivero y los elementos probatorios no fueron suficientes para poderle atribuir el asesinato de Jorge Martínez". La mujer llegó a juicio acusada por la supuesta autoría del delito de "homicidio calificado por el vínculo y con alevosía".
Además la fiscal de sala dijo que "en la requisitoria fiscal se mal interpretó el informe del Cuerpo de Investigaciones Fiscales de la provincia de Salta, donde el resultado del barrido electrónico que se le hizo a una prenda de vestir que usó en ese momento Rivero, dio no positivo", porque se hallaron partículas "consistentes"pero en distintas partes de esa prenda se halló esa partícula hasta en la "capucha" de la camiseta.
Es por eso que la fiscal Liliana Montiel había solicitado que "Eli" Rivero fuera absuelta por el beneficio de la duda, al no encontrar prueba concreta de la autoría del crimen.
Perico suma otro crimen sin resolver
Antes que se diera a conocer el fallo, la querella a cargo de Claudia Kuntz había solicitado la pena de prisión perpetua para la acusada, considerándola autora responsable del crimen de su novio. Pero los elementos probatorios no "fueron suficientes" para el Tribunal, que fue el que resolvió el fallo.
En el medio de todas las diligencias investigativas, notoriamente mal encaminadas desde un principio, quedó otro crimen sin resolver en la ciudad tabacalera. Situación que preocupa a los encargados de impartir justicia, porque no es la primera vez que un crimen queda sin ser resuelto a causa de negligencias de los efectivos policiales.
Los familiares de la víctima no encontraron "la paz que vinieron a buscar" con el fallo de este juicio, y la resolución del Tribunal enjuiciador da cuenta que una mujer estuvo detenida casi dos años sin una prueba certera que pudiera incriminarla en un homicidio.
Y tal vez nunca se sepa qué fue lo que realmente sucedió ese día.
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