La Sala I de la Cámara Federal apartó ayer al juez federal Rodolfo Canicoba Corral de la investigación por presunto lavado de dinero contra la madre del fallecido fiscal Alberto Nisman, Sara Garfunkel; su hermana Sandra; y el empleado informático Diego Lagomarsino.
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La Sala I de la Cámara Federal apartó ayer al juez federal Rodolfo Canicoba Corral de la investigación por presunto lavado de dinero contra la madre del fallecido fiscal Alberto Nisman, Sara Garfunkel; su hermana Sandra; y el empleado informático Diego Lagomarsino.
Fuentes judiciales informaron que el Tribunal hizo lugar a un pedido de recusación de Sara Garfunkel y apartó a Canicoba Corral de la investigación que se inició tras el fallecimiento de Nisman, a raíz de una serie de bienes que se le atribuyen, como una cuenta en Estados Unidos con más de 666.000 dólares.
La recusación había sido planteada por presunta falta de imparcialidad y enemistad manifiesta: puntualmente, el abogado Pablo Lanusse, defensor de Garfunkel y Sandra Nisman, se basó en declaraciones que éste hizo a la prensa en las que aseguró que los números del entonces titular de la Unidad Amia “no cierran por ningún lado” y que “claramente” había incurrido en lavado de dinero.
El apartamiento de Canicoba Corral, a raíz del cual en las próximas horas se designará a su reemplazante, se produjo luego de que citara a indagatoria a Sara Garfunkel, Sandra Nisman, Diego Lagomarsino y el empresario Claudio Picón.
“Frente a las declaraciones mediáticas que formuló de antemano, difícilmente los encausados pudieran observar neutralidad o tener expectativas razonables sobre la utilidad de su descargo y la consideración que fuera a recibir en sede judicial”, votó el juez Eduardo Farah.
Por su parte, el camarista Jorge Ballestero consideró que si bien no encontró prejuzgamiento por parte de Canicoba Corral sí “que las expresiones proferidas ante distintos medios de comunicación ameritan el temor de parcialidad invocado por los recusantes”.
La familia del fallecido fiscal y Lagomarsino son investigados por presunto lavado de dinero a raíz de una serie de bienes, como un fideicomiso a nombre de su madre, y además porque los tres eran titulares de una cuenta bancaria en el Merril Lynch de Nueva York, de la que Alberto Nisman era su apoderado.