Se conocieron importantes novedades en cuanto a los avances de la causa que investiga la muerte del joven Sergio Gabriel "Pik" Narbay. Es que los resultados de ADN expuestos a un barrido electrónico en una prenda de vestir de una de las personas imputadas dio positivo en cuanto a la sangre de Narbay.
"Hace días tomé conocimiento que el resultado de una prueba de ADN realizado a una prenda de vestir secuestrada a uno de las personas que agredieron a mi hijo, dio positivo. Es por eso que me apersoné hasta la Fiscalía que entiende la causa para exigir la inmediata detención de este sujeto, que es menor de edad y también está involucrado en la muerte de mi hijo", le dijo a nuestro matutino Claudia Narbay, madre del joven asesinado a puñaladas el 15 de diciembre del año pasado.
Hay que tener en cuenta que de acuerdo a las primeras investigaciones se habría hallado restos de sangre en la mano y en una prenda de vestir de una persona menor de edad que quedó secuestrada, luego de que al menos tres personas agredieron con golpes y con un arma blanca a Sergio Narbay, en la esquina de las calles Bouchard y Azopardo del barrio San Pedrito.
Las dos personas que están detenidas son Leandro "Chori" Suárez y Francisco "Pancho" Mansilla. Ellos están acusados de ser los supuestos responsables de los delitos de "homicidio calificado por el concurso premeditado de número de personas intervinientes" y "robo calificado en poblado y en banda en coautoría y en concurso real".
La causa está a cargo del fiscal Aldo Lozano, quien reunió los elementos necesarios para imputar a estas dos personas y si bien el caso se encuentra en pleno proceso de investigación, con los resultados de las pericias químicas que se ordenaron es muy probable que se pida a la Fiscalía de Menores por la comparecencia del menor imputado.
"El abogado de uno de los imputados solicitó el cese de detención de su defendido, pero hace días el otro imputado lo comprometió en una ampliación de su declaración. Estamos esperando que el expediente sea devuelto a la Fiscalía para que se proceda a tomar recaudos a partir de los resultados de las pericias químicas. Para nosotros es importante que se ordene la detención de este menor, que en un momento se quiso desligar de la escena, pero esto lo vuelve a inculpar", dijo Claudia Narbay.
Lo reconocieron
El 15 de diciembre el año pasado, Sergio "Pik" Narbay había ido a ver junto a un amigo un partido de Gimnasia y Esgrima. Al término del partido volvía a su casa alrededor de las 23 y en la esquina de las calles Bouchard y Azopardo fue agredido por una patota.
Según los datos que aportaron los testigos, el ahora detenido Suárez y un grupo de personas, se encontraron con Mansilla que también estaba con su grupo. Allí, las dos bandas intentaron agredir a otros jóvenes que serían del barrio San Pedrito, con quienes tendrían viejos resquemores y arremetieron contra ellos, por lo que se libró una persecución.
Los sujetos reconocieron a Narbay que casualmente caminaba por ese sector y lo atacaron con golpes de puño y con un arma blanca. "Pik" recibió al menos quince heridas punzocortantes, tres de ellas le causaron profundas heridas, que luego le provocaron la muerte.
"Los tres agresores conocían a mi hijo y lo atacaron para matarlo", dijo Narbay.
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Se conocieron importantes novedades en cuanto a los avances de la causa que investiga la muerte del joven Sergio Gabriel "Pik" Narbay. Es que los resultados de ADN expuestos a un barrido electrónico en una prenda de vestir de una de las personas imputadas dio positivo en cuanto a la sangre de Narbay.
"Hace días tomé conocimiento que el resultado de una prueba de ADN realizado a una prenda de vestir secuestrada a uno de las personas que agredieron a mi hijo, dio positivo. Es por eso que me apersoné hasta la Fiscalía que entiende la causa para exigir la inmediata detención de este sujeto, que es menor de edad y también está involucrado en la muerte de mi hijo", le dijo a nuestro matutino Claudia Narbay, madre del joven asesinado a puñaladas el 15 de diciembre del año pasado.
Hay que tener en cuenta que de acuerdo a las primeras investigaciones se habría hallado restos de sangre en la mano y en una prenda de vestir de una persona menor de edad que quedó secuestrada, luego de que al menos tres personas agredieron con golpes y con un arma blanca a Sergio Narbay, en la esquina de las calles Bouchard y Azopardo del barrio San Pedrito.
Las dos personas que están detenidas son Leandro "Chori" Suárez y Francisco "Pancho" Mansilla. Ellos están acusados de ser los supuestos responsables de los delitos de "homicidio calificado por el concurso premeditado de número de personas intervinientes" y "robo calificado en poblado y en banda en coautoría y en concurso real".
La causa está a cargo del fiscal Aldo Lozano, quien reunió los elementos necesarios para imputar a estas dos personas y si bien el caso se encuentra en pleno proceso de investigación, con los resultados de las pericias químicas que se ordenaron es muy probable que se pida a la Fiscalía de Menores por la comparecencia del menor imputado.
"El abogado de uno de los imputados solicitó el cese de detención de su defendido, pero hace días el otro imputado lo comprometió en una ampliación de su declaración. Estamos esperando que el expediente sea devuelto a la Fiscalía para que se proceda a tomar recaudos a partir de los resultados de las pericias químicas. Para nosotros es importante que se ordene la detención de este menor, que en un momento se quiso desligar de la escena, pero esto lo vuelve a inculpar", dijo Claudia Narbay.
Lo reconocieron
El 15 de diciembre el año pasado, Sergio "Pik" Narbay había ido a ver junto a un amigo un partido de Gimnasia y Esgrima. Al término del partido volvía a su casa alrededor de las 23 y en la esquina de las calles Bouchard y Azopardo fue agredido por una patota.
Según los datos que aportaron los testigos, el ahora detenido Suárez y un grupo de personas, se encontraron con Mansilla que también estaba con su grupo. Allí, las dos bandas intentaron agredir a otros jóvenes que serían del barrio San Pedrito, con quienes tendrían viejos resquemores y arremetieron contra ellos, por lo que se libró una persecución.
Los sujetos reconocieron a Narbay que casualmente caminaba por ese sector y lo atacaron con golpes de puño y con un arma blanca. "Pik" recibió al menos quince heridas punzocortantes, tres de ellas le causaron profundas heridas, que luego le provocaron la muerte.
"Los tres agresores conocían a mi hijo y lo atacaron para matarlo", dijo Narbay.
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