Un joven fue condenado ayer a 14 años de prisión por el crimen de Dilma Pérez González, la promotora estrangulada en un departamento el día de su cumpleaños al salir de un boliche, en 2013, en el partido bonaerense de La Matanza, mientras que otro imputado fue absuelto.
El fallo fue dictado por el Tribunal Oral en lo Criminal 4 de La Matanza, que halló a Franco Distilo (22) responsable de "homicidio simple" y absolvió a Matías Testa (24) por motivos que aún se desconocen, ya que no fueron difundidos los fundamentos de la sentencia.
El abogado Andrés Bonicalzi, representante de la familia de Dilma y de la ONG Ayuda a Víctimas de Violación (Avivi), se mostró "conforme" con la condena a Distilo y dijo que una vez que se conozcan los argumentos de los jueces, evaluará si apela el fallo por la absolución de Testa.
"Tenemos que conversar con la familia, a ver si quieren seguir adelante. Para nosotros hay elementos de que Testa fue coautor del hecho, pero también sabemos que el más comprometido era Distilo", sostuvo el letrado.
Por su parte, el abogado Alfonso Franze, defensor de Testa, destacó que venía "sosteniendo su inocencia desde el principio" y dijo que esa noche su cliente se encontraba en el lugar donde murió la joven, pero no tuvo ninguna relación.
Franze sostuvo que Testa se encontraba durmiendo cuando la joven murió y que "fue imputado por la fiscalía como que el estrangulamiento se produjo cuando él la sostenía y Distilo la ahorcaba".
No obstante, según el letrado, a su criterio en el juicio no quedó acreditado que Dilma haya sido estrangulada y pidió esperar los fundamentos para ver cómo los jueces creen que se produjo el crimen.
Durante los alegatos del juicio, el fiscal Miguel Froncillo había reclamado 15 años de prisión para los acusados, mientras que Bonicalzi solicitó 14 años para ambos.
Por su parte, las defensas de los imputados habían pedido la absolución basadas en que no se probó el estrangulamiento, entre otras cuestiones.
La muerte de la promotora se registró el 31 de octubre de 2013, antes de ser llevada -ya fallecida- por tres jóvenes al hospital Paroissien, de la localidad de Isidro Casanova.
En la etapa de instrucción, los acusados dijeron que comenzaron a conversar con la promotora en el boliche y que la invitaron "a consumir cocaína", a lo que accedió.
Ambos aseguraron que la invitaron a acompañarlos y presuntamente la joven aceptó, por lo que fueron todos juntos al departamento que un amigo tenía alquilado en la localidad de San Justo, que estaba vacío porque terminaba el contrato y debía devolverlo días más tarde.
Los jóvenes declararon que una vez allí el tercer amigo se fue porque debía ir a trabajar, que Testa se fue a acostar a una habitación y que Franco se quedó junto a Dilma conversando, acostados en un colchón tirado en el piso de la cocina.
Los imputados relataron además que, si bien ninguno de ellos tomó cocaína, proveyeron de esa sustancia a la víctima, quien la habría consumido en gran cantidad.
"Se está muriendo"
Testa manifestó que Franco fue a despertarlo y le dijo a los gritos "vení, vení, se está muriendo", y que a continuación ambos trataron de socorrer a la víctima mientras sufría convulsiones y vomitaba.
Sin embargo, esa versión quedó desacreditada en el juicio y el TOC 4 consideró a Distilo autor del homicidio de la joven.
Para Bonicalzi, la autopsia es clara en cuanto a que la joven sufrió un estrangulamiento y no que murió de una sobredosis de cocaína, como sostuvieron los acusados.
Es que en un primer momento los imputados declararon que encontraron a la promotora tirada en una esquina, con convulsiones, y que la llevaron al hospital.
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Un joven fue condenado ayer a 14 años de prisión por el crimen de Dilma Pérez González, la promotora estrangulada en un departamento el día de su cumpleaños al salir de un boliche, en 2013, en el partido bonaerense de La Matanza, mientras que otro imputado fue absuelto.
El fallo fue dictado por el Tribunal Oral en lo Criminal 4 de La Matanza, que halló a Franco Distilo (22) responsable de "homicidio simple" y absolvió a Matías Testa (24) por motivos que aún se desconocen, ya que no fueron difundidos los fundamentos de la sentencia.
El abogado Andrés Bonicalzi, representante de la familia de Dilma y de la ONG Ayuda a Víctimas de Violación (Avivi), se mostró "conforme" con la condena a Distilo y dijo que una vez que se conozcan los argumentos de los jueces, evaluará si apela el fallo por la absolución de Testa.
"Tenemos que conversar con la familia, a ver si quieren seguir adelante. Para nosotros hay elementos de que Testa fue coautor del hecho, pero también sabemos que el más comprometido era Distilo", sostuvo el letrado.
Por su parte, el abogado Alfonso Franze, defensor de Testa, destacó que venía "sosteniendo su inocencia desde el principio" y dijo que esa noche su cliente se encontraba en el lugar donde murió la joven, pero no tuvo ninguna relación.
Franze sostuvo que Testa se encontraba durmiendo cuando la joven murió y que "fue imputado por la fiscalía como que el estrangulamiento se produjo cuando él la sostenía y Distilo la ahorcaba".
No obstante, según el letrado, a su criterio en el juicio no quedó acreditado que Dilma haya sido estrangulada y pidió esperar los fundamentos para ver cómo los jueces creen que se produjo el crimen.
Durante los alegatos del juicio, el fiscal Miguel Froncillo había reclamado 15 años de prisión para los acusados, mientras que Bonicalzi solicitó 14 años para ambos.
Por su parte, las defensas de los imputados habían pedido la absolución basadas en que no se probó el estrangulamiento, entre otras cuestiones.
La muerte de la promotora se registró el 31 de octubre de 2013, antes de ser llevada -ya fallecida- por tres jóvenes al hospital Paroissien, de la localidad de Isidro Casanova.
En la etapa de instrucción, los acusados dijeron que comenzaron a conversar con la promotora en el boliche y que la invitaron "a consumir cocaína", a lo que accedió.
Ambos aseguraron que la invitaron a acompañarlos y presuntamente la joven aceptó, por lo que fueron todos juntos al departamento que un amigo tenía alquilado en la localidad de San Justo, que estaba vacío porque terminaba el contrato y debía devolverlo días más tarde.
Los jóvenes declararon que una vez allí el tercer amigo se fue porque debía ir a trabajar, que Testa se fue a acostar a una habitación y que Franco se quedó junto a Dilma conversando, acostados en un colchón tirado en el piso de la cocina.
Los imputados relataron además que, si bien ninguno de ellos tomó cocaína, proveyeron de esa sustancia a la víctima, quien la habría consumido en gran cantidad.
"Se está muriendo"
Testa manifestó que Franco fue a despertarlo y le dijo a los gritos "vení, vení, se está muriendo", y que a continuación ambos trataron de socorrer a la víctima mientras sufría convulsiones y vomitaba.
Sin embargo, esa versión quedó desacreditada en el juicio y el TOC 4 consideró a Distilo autor del homicidio de la joven.
Para Bonicalzi, la autopsia es clara en cuanto a que la joven sufrió un estrangulamiento y no que murió de una sobredosis de cocaína, como sostuvieron los acusados.
Es que en un primer momento los imputados declararon que encontraron a la promotora tirada en una esquina, con convulsiones, y que la llevaron al hospital.
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