Juan Román Riquelme brilló para Argentinos y agudizó la crisis de Racing Club, marcando el único tanto del encuentro con el cual el "bicho" eliminó a la "academia" en los octavos de final de la Copa Argentina. Los de Borghi jugarán la próxima fase ante Estudiantes de Caseros.
El "Tomás Adolfo Ducó" fue el escenario de este, donde más allá del presente que vive cada uno, el encuentro se parecía a uno de los tantos que tuvieron en la Primera División del torneo doméstico.
La presencia de un grande, acompañado por una multitud, y el nombre de Juan Román Riquelme en el "bicho" garantizaban entretenimiento en Parque de los Patricios. La pelota parada pareció ser la herramienta más eficiente para ambos.
Un centro cruzado del ex enganche de Boca estuvo cerca de poner al elenco de Claudio Borghi en ventaja, pero Matías Caruzzo no logró anticipar a Sebastián Saja.
En cambio, la "academia" se acercó a través de un tiro de esquina ejecutado por Luciano Aued para la cabeza de Lollo. El central hizo lucir a un Adrián Gabbarini que respondió con máxima seguridad.
La polémica de la tarde ocurrió a la salida de un balón detenido. El disparo del ex lateral del Milan rebotó en la mano de Cristian Álvarez, y los pedidos de penal fueron ignorados por Jorge Baliño.
La lesión en la muñeca del defensor pareció no impresionar al árbitro, que argumentó su decisión con la intencionalidad que mostró el central.
En el complemento, la fórmula de la felicidad la frotó Juan Román Riquelme. Cuando todos se imaginaban un centro, el virtuoso enganche sorprendió con un golazo que encendió las alarmas en Racing. La mala reacción de Sebastián Saja colaboró con la conquista del máximo ídolo de Boca.
Unos instantes después, la pegada del "Topo Gigio" volvió a generar emociones en el Ducó. El "10" se atrevió con un olímpico, en el que hizo volar al "Chino" para que no se concrete el segundo. Los minutos transcurrían y la "academia" seguía confundida. La reacción la intentó despertar con el ingreso de Wason Rentería.
La falta de ideas y la desesperación por el empate dejaron a Racing con uno menos por la roja que vio Luciano Aued por una falta contra Juan Ramírez.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla
Juan Román Riquelme brilló para Argentinos y agudizó la crisis de Racing Club, marcando el único tanto del encuentro con el cual el "bicho" eliminó a la "academia" en los octavos de final de la Copa Argentina. Los de Borghi jugarán la próxima fase ante Estudiantes de Caseros.
El "Tomás Adolfo Ducó" fue el escenario de este, donde más allá del presente que vive cada uno, el encuentro se parecía a uno de los tantos que tuvieron en la Primera División del torneo doméstico.
La presencia de un grande, acompañado por una multitud, y el nombre de Juan Román Riquelme en el "bicho" garantizaban entretenimiento en Parque de los Patricios. La pelota parada pareció ser la herramienta más eficiente para ambos.
Un centro cruzado del ex enganche de Boca estuvo cerca de poner al elenco de Claudio Borghi en ventaja, pero Matías Caruzzo no logró anticipar a Sebastián Saja.
En cambio, la "academia" se acercó a través de un tiro de esquina ejecutado por Luciano Aued para la cabeza de Lollo. El central hizo lucir a un Adrián Gabbarini que respondió con máxima seguridad.
La polémica de la tarde ocurrió a la salida de un balón detenido. El disparo del ex lateral del Milan rebotó en la mano de Cristian Álvarez, y los pedidos de penal fueron ignorados por Jorge Baliño.
La lesión en la muñeca del defensor pareció no impresionar al árbitro, que argumentó su decisión con la intencionalidad que mostró el central.
En el complemento, la fórmula de la felicidad la frotó Juan Román Riquelme. Cuando todos se imaginaban un centro, el virtuoso enganche sorprendió con un golazo que encendió las alarmas en Racing. La mala reacción de Sebastián Saja colaboró con la conquista del máximo ídolo de Boca.
Unos instantes después, la pegada del "Topo Gigio" volvió a generar emociones en el Ducó. El "10" se atrevió con un olímpico, en el que hizo volar al "Chino" para que no se concrete el segundo. Los minutos transcurrían y la "academia" seguía confundida. La reacción la intentó despertar con el ingreso de Wason Rentería.
La falta de ideas y la desesperación por el empate dejaron a Racing con uno menos por la roja que vio Luciano Aued por una falta contra Juan Ramírez.
PUBLICIDAD
