Vive en una piña debajo del mar, se llama Bob Esponja y... es gay. Así de contundente es un estudio elaborado por la Comisión Nacional para la Defensa de los Valores Morales, en el que se afirma que el simpático dibujo, que con su verborrea subacuática encandila en España desde el canal Clan, es homosexual y «presenta una amenaza real para los niños».
La teoría sobre la orientación sexual de la televisiva 'esponja' no es nueva. En 2002, el prestigioso diario 'The Wall Street Journal' llegó a la misma conclusión. En sus páginas se hablaba de un análisis sociológico en el que se probaba que un tercio de la audiencia de la serie, ideada para niños de entre 2 y 11 años, era adulta y en su gran mayoría gay. Claro que de ahí a criminalizar al jovial Bob...
Este informe es un síntoma más de un mal mayor que se extiende por Ucrania, un país denunciado por sus continuas violaciones de los derechos humanos. Ya durante la Eurocopa, los dirigentes de la UE y de los países miembros decidieron no acudir a los partidos que se disputasen en su territorio, una forma de protestar por el maltrato sufrido por la exprimera ministra ucraniana Yulia Timoshenko, que lleva más de un año encarcelada.
La homosexualidad es uno de los tantos tabúes que en Ucrania siguen sin superar. Aunque se despenalizó hace diez años, sigue siendo perseguida. Muestra de ello es el proyecto de ley con el que el Gobierno pretende limitar lo que ellos llaman «propaganda homosexual» y así evitar que se pueda hablar sobre el tema en espacios públicos.
La Comisión Nacional sobre asuntos para la Comisión Nacional para la Defensa de los Valores Morales ha dejado la pelota en el tejado de las autoridades del país, que ahora decidirán qué hacer con Bob Esponja. Otras series de dibujos animados -aunque no todas son infantiles- como 'Los Simpson', 'Padre de familia', 'Pokemon' o 'Futurama' también figuran en la lista negra. A su juicio, están «dirigidas a la destrucción de la familia y la propaganda del vicio y las drogas».
«El hombre subnormal»
inicia sesión o regístrate.
Vive en una piña debajo del mar, se llama Bob Esponja y... es gay. Así de contundente es un estudio elaborado por la Comisión Nacional para la Defensa de los Valores Morales, en el que se afirma que el simpático dibujo, que con su verborrea subacuática encandila en España desde el canal Clan, es homosexual y «presenta una amenaza real para los niños».
La teoría sobre la orientación sexual de la televisiva 'esponja' no es nueva. En 2002, el prestigioso diario 'The Wall Street Journal' llegó a la misma conclusión. En sus páginas se hablaba de un análisis sociológico en el que se probaba que un tercio de la audiencia de la serie, ideada para niños de entre 2 y 11 años, era adulta y en su gran mayoría gay. Claro que de ahí a criminalizar al jovial Bob...
Este informe es un síntoma más de un mal mayor que se extiende por Ucrania, un país denunciado por sus continuas violaciones de los derechos humanos. Ya durante la Eurocopa, los dirigentes de la UE y de los países miembros decidieron no acudir a los partidos que se disputasen en su territorio, una forma de protestar por el maltrato sufrido por la exprimera ministra ucraniana Yulia Timoshenko, que lleva más de un año encarcelada.
La homosexualidad es uno de los tantos tabúes que en Ucrania siguen sin superar. Aunque se despenalizó hace diez años, sigue siendo perseguida. Muestra de ello es el proyecto de ley con el que el Gobierno pretende limitar lo que ellos llaman «propaganda homosexual» y así evitar que se pueda hablar sobre el tema en espacios públicos.
La Comisión Nacional sobre asuntos para la Comisión Nacional para la Defensa de los Valores Morales ha dejado la pelota en el tejado de las autoridades del país, que ahora decidirán qué hacer con Bob Esponja. Otras series de dibujos animados -aunque no todas son infantiles- como 'Los Simpson', 'Padre de familia', 'Pokemon' o 'Futurama' también figuran en la lista negra. A su juicio, están «dirigidas a la destrucción de la familia y la propaganda del vicio y las drogas».
«El hombre subnormal»
Lo avala la psicóloga Irina Medvédeva, quien colabora en el informe y asegura que los niños de entre 3 y 5 años que participaron en el estudio «hacen muecas y burlas delante de adultos que no conocen, ríen a carcajadas y repiten sinsentidos de manera ostentosa» después de ver estas series.
No se libran ni los dulces 'Teletubbies', quienes, según el informe, persiguen «la creación intencionada del hombre subnormal, que se pasa todo el día delante de la televisión con la boca abierta y tragándose cualquier información». Vamos, que «conforman la psicología de los perdedores».
También la orientación sexual de los 'Teletubbies' se ha puesto en duda en alguna ocasión. La defensora del menor de Polonia pidió en 2007 que se analizase la serie, ya que había indicios de «propaganda homosexual». «Me di cuenta de que Tinky Winky llevaba un bolso, pero no sabía que fuera un chico. Más tarde comprendí que ahí podría haber un nexo homosexual oculto», comentó.
En Polonia, aunque la homosexualidad nunca ha estado penada, los gays no terminan de sentirse seguros. De hecho, una asociación de homosexuales forofos del fútbol pidió que en los estadios de la Eurocopa se fijase una grada para ellos y evitar así las agresiones.
FUENTE: www.elcorreo.com
