El juez Julián Ercolini resolvió ayer citar a indagatoria al expresidente Alberto Fernández para el 4 de febrero próximo, en la causa en la que se lo investiga por violencia de género contra su expareja Fabiola Yañez.
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El juez Julián Ercolini resolvió ayer citar a indagatoria al expresidente Alberto Fernández para el 4 de febrero próximo, en la causa en la que se lo investiga por violencia de género contra su expareja Fabiola Yañez.
La decisión del magistrado se produce un día después de que la Cámara Federal rechazara los planteos de Fernández contra Ercolini y lo ratificara al frente del caso.
El juez de la sala I de la Cámara Federal, Eduardo Farah, sostuvo anteayer que no existen elementos que sugieran pérdida de imparcialidad por parte de Ercolini, que fue el argumento principal del expresidente para pedir su corrimiento del caso.
Con ese planteo, Fernández había logrado forzar la suspensión de su indagatoria, prevista en primer término para el 11 de diciembre, luego postergada para el 19 y finalmente suspendida. Ahora ya tiene nueva fecha para el próximo año.
La defensa de Fernández cuestiona la participación de Ercolini por el rol que tuvo el juez en el nacimiento de la causa, que es un desprendimiento del caso de las millonarias comisiones pagadas a brokers de los seguros que contrató el Estado durante el gobierno anterior, también en manos del juez federal.
Para la abogada del expresidente, Silvina Carreira, Ercolini promovió la apertura de este nuevo expediente desde la otra causa. Como terminó recalando en su juzgado, el rol del juez se desdibuja y se confunde con el de denunciante, sostiene la abogada.
La argumentación
"Considero que ninguno de estos motivos lleva al apartamiento del magistrado", contestó Farah en su resolución. "Ninguno de los argumentos del planteo da pie a un temor fundado de parcialidad", redundó, y agregó: "No hay en el proceder que antecedió a aquella disposición, ninguna acción que sugiera pérdida de neutralidad del juez frente a la situación que se le presentó en base al contenido de evidencias incautadas en otro proceso".
El juez Farah también desestimó las razones detrás del cuestionamiento a la jurisdicción, una estrategia que la abogada intentó sin éxito en el pasado. "Es inviable rechazar la intervención del magistrado federal que previno en el tema y que dirige la instrucción en la actualidad", remarcó el camarista.
Sostuvo que parte de los hechos se desarrollaron siendo Fernández presidente de la Nación, en un lugar en donde el gobierno federal tiene exclusiva jurisdicción. Además, afirmó que la imputación del fiscal, que acusó a Fernández por lesiones graves agravadas en un contexto de violencia de género, excede las "circunstancias de tiempo, modo y lugar y abarcan también conductas que se habrían perpetrado antes y después de aquello, en esta ciudad y/o mediante comunicaciones con la víctima que residía en el extranjero".
Sobre si el caso quedaba en Comodoro Py o no, el juez aseguró que "las diferentes circunstancias que expusieron la fiscalía y el juez dejan en evidencia una serie de factores con incidencia en la competencia por la materia y el territorio, que deben valorarse al definir la cuestión. Creo, como lo hice en una previa, que en este contexto es inviable rechazar la intervención del magistrado federal que previno en el tema y que dirige la instrucción en la actualidad".
"Tomando tales parámetros como guía, cabe mantener la intervención del juez federal que previno, ha estado al frente de la causa desde su inicio y convocó al imputado a declarar en indagatoria", concluyó el magistrado. Con ese aval de la Cámara, Ercolini fijó la nueva fecha de indagatoria de Alberto Fernández, el primer martes después de la feria judicial de enero.