A través de la Sede Fiscal Descentralizada de Orán, bajo la dirección de la fiscal interina María del Carmen Núñez y en coordinación con su par de Tartagal, Marcos Romero, intervino en las actuaciones preliminares tras un enfrentamiento ocurrido durante un operativo de Gendarmería Nacional.
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A través de la Sede Fiscal Descentralizada de Orán, bajo la dirección de la fiscal interina María del Carmen Núñez y en coordinación con su par de Tartagal, Marcos Romero, intervino en las actuaciones preliminares tras un enfrentamiento ocurrido durante un operativo de Gendarmería Nacional.
El procedimiento se llevó a cabo en el sector conocido como "La Isla", a la vera del río Pescado y cercano al puesto fijo "28 de Julio". Allí, efectivos de las Secciones de Orán y Aguas Blancas detectaron el paso de un grupo numeroso de bagayeros, quienes al advertir la presencia de las fuerzas de seguridad abandonaron bultos en el lugar y escaparon hacia el monte. Cuando los gendarmes intentaron levantar los paquetes, fueron atacados a pedradas.
Ante la agresión, los uniformados respondieron con disparos de municiones antitumulto, logrando dispersar a los atacantes. Durante el operativo, uno de los bultos recuperados generó sospechas por su embalaje, que indicaría la presencia de estupefacientes.
Más tarde, un grupo de personas se presentó frente al puesto fijo con la aparente intención de tomarlo, mientras denunciaban la muerte de una persona. En ese contexto, los efectivos volvieron a responder utilizando municiones de goma, logrando disipar el ataque.
Desde el hospital de Aguas Blancas se confirmó el fallecimiento de un hombre que había sido trasladado por bagayeros y se informó sobre tres heridos, quienes habrían sufrido lesiones durante el enfrentamiento.
La fiscal Núñez dispuso diversas diligencias para esclarecer los hechos, abarcando tanto el secuestro de los bultos, las agresiones sufridas por los gendarmes, el enfrentamiento posterior, como las circunstancias del fallecimiento y las heridas de las otras personas involucradas.
Por el momento la Ruta 50 tiene el tránsito cortado con una gran cantidad de vehículos varados en la misma, dejando incomunicado el tramo que conecta Arroyo Zenta con Río Blanco. Este corte de ruta se da en el contexto de un fuerte rechazo a los controles implementados en el marco del Plan Güemes, una estrategia nacional destinada a combatir el contrabando y reforzar la seguridad fronteriza.
Los bagayeros sostienen que las estrictas medidas afectan gravemente su economía, ya que dependen del traslado de mercadería desde Bolivia para su sustento. "Estos controles nos quitan el pan de cada día", señalaron algunos de los manifestantes que permanecen en la ruta.
