Con el anhelo de recuperar alimentos ancestrales y fomentar el consumo de una raíz pivotante llamada ajipilla que crece en los arenales puneños, 14 alumnos de 4º año del Bachillerato Provincial Nº 13 "Comandante Luis Piedrabuena" de Susques junto a dos docentes llevan adelante un interesante proyecto de investigación.
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Con el anhelo de recuperar alimentos ancestrales y fomentar el consumo de una raíz pivotante llamada ajipilla que crece en los arenales puneños, 14 alumnos de 4º año del Bachillerato Provincial Nº 13 "Comandante Luis Piedrabuena" de Susques junto a dos docentes llevan adelante un interesante proyecto de investigación.
También "Tejiendo memoria con voces de Catua" del Secundario 20 y "Aromas de la Puna" de la Técnica 2 de Olaroz Chico.
Bajo el nombre "Ajipilla, un tesoro andino desde la ciencia a la mesa" se presentaron en la primera experiencia para Escuelas de Períodos Especiales de la Feria de Arte, Ciencia y Tecnología del Ministerio de Educación de la Provincia. El valor de su trabajo permitió que quede entre los 3 jujeños seleccionados para la instancia nacional del 14 de este mes en Catamarca.
Los profesores que acompañan a los estudiantes de 4º son Yolanda Benítez del área de Biología y Manuel Peñaloza del área de Educación Física. Además del respaldo del establecimiento agradecieron a los padres de los participantes por el apoyo y colaboración brindados.
Según relataron los protagonistas, el proyecto comenzó en diciembre del 2024 con una ardua cosecha de ajipilla puesto que necesitaron 70 kilos para el proyecto. Como hasta el momento es meramente silvestre, el inmenso esfuerzo puede medirse en que durante dos horas y media bajo el sol y el viento de la Puna llegaban a obtener cuarto kilo.
Tras el proceso de limpieza y procesamiento los chicos elaboraron distintos productos como deliciosas mermeladas, tartas, jugos, compotas, piononos, bizcochuelos y más. Los pusieron a la venta en la Feria del Trueque en Susques y con los fondos pudieron autosolventar los gastos para varios insumos que precisaban para el certamen.
La ajipilla es una raíz ancestral que se dejó de consumir pero que los tatarabuelos y bisabuelos puneños enseñaron a comer a sus hijos, por ejemplo para calmar el dolor de estómago. Según comentaron tiene un sabor dulce como la manzana y generalmente la sacaban de la tierra, la lavaban y consumían.
El proyecto sigue avanzando pero necesitan ayuda de algún laboratorio, sea de la Universidad Nacional de Jujuy u otro, para conocer el valor nutricional, los aportes de proteínas, minerales, vitaminas y demás que tiene esta raíz. Con esos datos podrían potenciar el mercado del emprendimiento y lograr mayor valor agregado. La continuidad de la iniciativa estaría dada también con la posibilidad de cultivarla y garantizar el stock en mejores condiciones de cosecha.
La ajipilla comienza a crecer en diciembre o enero y en marzo está en etapa de recolección. No se encuentra en gran proporción y variedad como sucede con el tomate silvestre, puede estar con una distancia de 15 a 20 metros entre planta y planta, de allí el mote de "tesoro andino" que le dieron los chicos y su interés en poder cultivarla.
La Feria de Ciencia provincial se realizó el 28 de abril en el Bachillerato Nº 13 con el acompañamiento del comisionado de Susques, Eladio Vásquez, el director provincial de la Agencia de Ciencia, Tecnología e Innovación, Luis Bono; la coordinadora provincial de Feria de Ciencias, Gabriela Camacho y su equipo.