Las actividades empezaron a por la mañana, con las chayadas y agradecimientos a la Pachamama, para luego dar paso al gran topamiento de comparsas, donde participaron grupos musicales locales e invitados. Ya por la tarde, se realizó el simulacro de la bajada de Los diablos de Uquía, desde el cerro El Mirador, llevando a cabo por primera vez en la ciudad fronteriza una de las celebraciones más representativas de los carnavales del norte jujeño. Por último, se dio el topamiento intercultural en el predio de la Manka Fiesta.
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Las actividades empezaron a por la mañana, con las chayadas y agradecimientos a la Pachamama, para luego dar paso al gran topamiento de comparsas, donde participaron grupos musicales locales e invitados. Ya por la tarde, se realizó el simulacro de la bajada de Los diablos de Uquía, desde el cerro El Mirador, llevando a cabo por primera vez en la ciudad fronteriza una de las celebraciones más representativas de los carnavales del norte jujeño. Por último, se dio el topamiento intercultural en el predio de la Manka Fiesta.
La Municipalidad de La Quiaca, junto a la Comisión de Comparsas Quiaqueñas y la Asociación Los alegres de Uquía, organizaron esta fiesta previa al carnaval.
Cabe destacar que la bajada de los diablos, que comenzó en 1942, se transformó en un símbolo del carnaval norteño, con una puesta en escena que combina rituales ancestrales y festividad popular, capturando la esencia de la cosmovisión andina en una de las expresiones culturales más auténticas de nuestro país y que se destaca a nivel internacional como una muestra de la riqueza cultural jujeña.
Al respecto, el intendente de La Quiaca, Dante Velázquez, se mostró gratamente sorprendido por el enorme acompañamiento y la participación, no solo de los quiaqueños sino de visitantes que llegaron de pueblos y localidades vecinas para disfrutar de un evento único. "No creo haber visto nunca tanta gente en un evento gratuito y de estas características, lo que nos da la pauta de que realmente logramos algo histórico que superó todas las expectativas", dijo.
El intendente quiaqueño, destacó la importancia de entender a La Quiaca como parte de un "todo andino", subrayando el valor de la integración cultural como un aporte a la cosmovisión global, refiriendo que el objetivo de invitar a la comparsa Los alegres de Uquía y realizar el simulacro de la tradicional bajada de los diablos para terminar en un topamiento junto a todas las comparsas locales, es que "generemos un puente entre las tradiciones de la Quebrada y la Puna, para abrir nuestras mentes y reconocernos como una región importante, donde cada comunidad suma su magia al mundo andino, reflejando la autenticidad y diversidad cultural del norte argentino".
A su vez, el mandatario norteño indicó que en tiempos difíciles como los que está viviendo nuestro país, una celebración como el Carnaval toma mayor fuerza ya que se trata de "un evento que no es solo para verlo, sino para vivirlo, que nos permite sentirnos parte de algo más grande y en el norte jujeño y en la Puna, esta es nuestra manera de compartir la alegría y rendir homenaje a nuestras raíces, con una celebración única que da cuenta de la riqueza de nuestra identidad cultural", concluyó.
