Del 8 al 10 de julio del 2015, el Papa Francisco visitó Bolivia, y El Tribuno de Jujuy siguió su actividad. Hace casi diez años, apenas arribó a El Alto y La Paz, recibió el afecto de la población local y de los miles de jujeños que llegaron para verlo.
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Del 8 al 10 de julio del 2015, el Papa Francisco visitó Bolivia, y El Tribuno de Jujuy siguió su actividad. Hace casi diez años, apenas arribó a El Alto y La Paz, recibió el afecto de la población local y de los miles de jujeños que llegaron para verlo.
Luego se trasladó hacia Santa Cruz de la Sierra, donde fue recibido por el entonces presidente Evo Morales Aima. Allí celebró una misa ante cientos de miles de personas, que desde varios días previos aguardaban su presencia.
Cumplió una extensa agenda, que incluyó la visita al penal de Palma Sola y ser participe del Encuentro Mundial de los Movimientos Populares. "Me alegro de estar aquí en un país de singular belleza, bendecido por Dios en sus diversas zonas, el altiplano, los valles, las tierras amazónicas, los desiertos, los incomparables lagos. Esto me recuerda que el mundo es algo más que un problema a resolver, es un misterio gozoso que contemplamos con jubilosa alabanza y, sobre todo, es una tierra bendecida por su gente con su variada realidad cultural y étnica, que constituye una gran riqueza y un llamado permanente al respeto mutuo y al diálogo", expresó en aquella ocasión.
Para quienes tuvimos la oportunidad de estar a tan solo unos metros del máximo referente del catolicismo, este viaje quedará para siempre en la memoria. El recuerdo del "Papa del Pueblo", siempre al lado de los que menos tienen, con ese andar tranquilo, transmitía esperanza para un mundo convulsionado.
Una experiencia única e inigualable para este periodista, que cuando se acercaba el "Papa Móvil" en medio de la multitud, las lágrimas de emoción lo vencieron.
Antes de su partida, el Papa pasó unos momentos delante de la Virgen de Copacabana, patrona de Bolivia, muy ligada al pueblo jujeño y salteño. Y dijo: "En este momento pongo en tu corazón mis oraciones, por todas las peticiones de tus hijos que he recibido en estos días. Te suplico que los escuches, concede a ellos tu aliento y tu protección, y manifiesta a toda Bolivia tu ternura de mujer y Madre de Dios, que vive y reina por los siglos de los siglos, amén".