Hasta mediados de mes el becario del Conicet con asiento en el Inta Castelar, Damián Freilij, permanecerá en Jujuy para continuar con los ensayos de aptitud de los maíces de variedades locales del NOA y NEA que se vienen sembrando en el campo experimental del Ipaf NOA-Inta, en Hornillos (Maimará).
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Hasta mediados de mes el becario del Conicet con asiento en el Inta Castelar, Damián Freilij, permanecerá en Jujuy para continuar con los ensayos de aptitud de los maíces de variedades locales del NOA y NEA que se vienen sembrando en el campo experimental del Ipaf NOA-Inta, en Hornillos (Maimará).
En sus primeras estancias, realizó una caracterización fenológica registrando el largo de los ciclos de cada una de las variedades sembradas, junto a la caracterización vegetativa vinculada con el número de hojas, caracteres de esas hojas, diámetro del tallo, altura de la planta, con el objeto de poder ayudar a identificar esas poblaciones y grupos de las regiones NOA/NEA.
"Lo que me atrajo esta vez es lo relacionado con la cosecha y el rendimiento de cada una de las parcelas y poblaciones", declaró Freilij durante su labor en el extenso predio ubicado a unos 3 kilómetros al sur de Maimará.
Los equipos de Ipaf NOA y de EEA Salta realizaron la cosecha de los diferentes maíces, y una vez acondicionado el material, el becario comenzó esta nueva etapa de la investigación.
Sobre la misma especificó que por un lado analiza el rendimiento de las variedades locales, o sea cuántas mazorcas produjo cada una de esas poblaciones, posteriormente pesa el total de las mazorcas y de los granos para tener una idea de la adaptación, bajo la hipótesis de que las poblaciones nativas del NOA tendrán mayor adaptación que las del NEA.
Lo que actualmente está efectuando en el Ipaf-NOA, también se está produciendo en el NEA y en Pergamino, donde se espera un proceso similar.
Aclaró que a la vez, está tomando medidas en las mazorcas que tienen que ver con la identidad racial para saber qué es esa población, a qué raza pertenece, si es harinoso, cristalino, las formas, color y textura del grano y otras medidas relacionadas con la identidad.
Con los datos que obtiene, se realizan tareas estadísticas que revelan la existencia de un diferenciamiento geográfico claro (NOA/NEA) y, por otro lado, con el tipo de endosperma.
En gran parte del Noroeste Argentino lo que se conoce como región del NOA, la producción agrícola es realizada por productores familiares en ambientes de gran altitud (aproximadamente hasta 3.500 metros sobre el nivel del mar).
En esa zona se cultiva principalmente maíz, papa, poroto, habas y quinua, siendo el maíz el más sensible a las bajas temperaturas asociadas al aumento de la altitud.
Estos sistemas productivos presentan una gran riqueza cultural tanto en lo que hace a las prácticas agrícolas como a los usos de los productos cosechados.
Además, funcionan como importantes reservorios de diversidad genética debido a las características tan particulares de esos ambientes (bajas temperaturas, altas irradiancias, alto índice de UV), determinando la supervivencia de variedades únicas, combinado con las prácticas tradicionales de reproducción de semillas nativas.