El sector metalmecánico del Valle de los Pericos, que recientemente fue el foco de unas jornadas que aglutinaron a los actores del sector, se mostró optimista frente a las medidas nacionales y no prevé que las implicancias de la Ley Bases los afecten negativamente. Los industriales de la región confían en que los productos importados no podrán competir en precio y calidad con los producidos localmente, gracias a las condiciones específicas de producción de la zona.
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El sector metalmecánico del Valle de los Pericos, que recientemente fue el foco de unas jornadas que aglutinaron a los actores del sector, se mostró optimista frente a las medidas nacionales y no prevé que las implicancias de la Ley Bases los afecten negativamente. Los industriales de la región confían en que los productos importados no podrán competir en precio y calidad con los producidos localmente, gracias a las condiciones específicas de producción de la zona.
El sector atraviesa un período de mayor demanda y recuperación a pesar del alto costo de los insumos, por lo que estiman que están mejor que a finales del año anterior y primeros meses del presente.
Una de las consultas centrales durante las jornadas fue el Régimen de Incentivo a las Grandes Inversiones (Rigi), que ofrece beneficios fiscales, cambiarios y aduaneros para atraer inversiones extranjeras durante un período de 30 años. Mientras algunos sectores plantean que la importación de bienes de capital podría favorecer la compra de bienes usados y la devolución del IVA técnico no beneficiaría a las pymes, la Cámara Argentina de Fabricantes de Maquinaria Agrícola (Cafma) aboga por incluir a las pymes del interior en la Ley Bases para otorgarles beneficios similares.
Marco Saucedo, de una metalúrgica del sector agropecuario en Perico, expresó que, aunque hay demanda, el alto costo de la materia prima es un desafío constante. "La materia prima está muy cara, no bajan los precios. Eso es lo que nos afecta. Hay trabajo, pero los márgenes de ganancia son cada vez menores. Hay que disminuir los costos para poder seguir trabajando y mantener a la gente", aseguró. A modo de ejemplo explicó que UPN de 120 o 100 sale lo mismo con caño, que es un material más liviano, asumiendo que no hay lógica en esa paridad.
Además, destacó que el sector fue duramente golpeado por la fluctuación del dólar, con incrementos constantes en los costos de insumos. "El rubro nuestro ha sido muy golpeado por la economía y sigue siendo golpeado porque nosotros creo que somos los únicos que tenemos y seguimos teniendo subas cada dos semanas, antes era cada tres días y ahora es un poco menos", explicó en relación al impacto de la fluctuante cotización del dólar.
En cuanto al Rigi, Saucedo manifestó que aún no hay propuestas concretas y que las inversiones necesarias para participar en este régimen son extremadamente elevadas. Sin embargo, no teme la competencia de productos importados, ya que los productores locales valoran la calidad de los fabricados en la región. "Los productos importados pueden ser más baratos, pero no tienen la misma durabilidad en nuestras condiciones", afirmó.
Requieren mano de obra
Mientras, David Estrada, propietario de un establecimiento metalúrgico en Santo Domingo, también compartió su perspectiva. Según él, aunque hay mucho trabajo, la falta de mano de obra es un problema recurrente. "El precio está subiendo de acuerdo al dólar, o tal vez el hierro sube un poco más que el dólar, subieron un 15%, después bajaron, pero no hay un precio estable en los corralones", dijo.
Además, señaló que los precios de los materiales fluctúan constantemente, haciendo difícil prever costos. Sin embargo se mostró optimista, indicando que las medidas del Gobierno para ofrecer créditos a través de los bancos a 12 meses podrían ser un indicio de estabilización económica. "Eso hace que también al creer que el país está mejorando, uno puede financiar un poco la fabricación de herramientas. Así que lo vemos con buenas perspectivas", afirmó Estrada.
Estrada también abogó por un cambio en el abordaje de los planes sociales para incentivar a las personas a trabajar en el sector privado, lo que podría ayudar a solucionar la falta de mano de obra.
Otra opinión ofreció Eduardo Carrizo, fabricante de maquinaria agrícola, quien coincidió que tras un período de baja actividad a principios de año, el sector comenzó a reactivarse en marzo y abril. Sostuvo, sin embargo, que en la zona hay otros talleres que están un poquito más complicados con poco trabajo, aunque desconoce de qué dependerá.
Carrizo ve con buenos ojos la competencia extranjera, considerando que podría mejorar la competitividad local. "En Agroactiva en Santa Fe vi mucho movimiento y muchas maquinarias. Creo que el sector se está reactivando", afirmó.
De hecho, aunque el sector metalmecánico del Valle de los Pericos enfrenta desafíos significativos, como el alto costo de los insumos y la falta de mano de obra, sus actores se muestran optimistas y confían en la calidad de sus productos para competir con las importaciones. Las medidas del Gobierno, según su experiencia y la demanda actual, son vistas como un signo positivo hacia la estabilización económica y el crecimiento del sector.
El sector produce para la zona
El sector metalmecánico de Perico se expuso en mayo pasado durante el primer Foro de la Industria Metalmecánica de los Valles y años anteriores mediante Agrofierro, organizados por la Cámara Agrometalmecánica de los Valles de los Pericos, la Agencia de Extensión Rural del Inta Perico y el municipio local, con el apoyo del Gobierno de Jujuy.
Ambos destacaban el potencial del sector agrometalmecánico de la región, mostrando la producción de maquinaria y herramientas agrícolas fabricadas por empresas jujeñas, la última con 19 pymes. Estas trabajan en sintonía con las necesidades, el terreno y las exigencias de los productores locales y producen abonadoras, cinceles, acoplados, arados, cultivadoras de caña, rastras y acordonadoras. Subrayan la importancia de invertir en maquinaria producida en Jujuy ya que se entrega lista para su uso, regulada y probada, con una garantía de calidad y la confianza de conocer directamente a los fabricantes.
