Antes de emprender su viaje de regreso a España, el obispo emérito de la Prelatura de Humahuaca, Pedro Olmedo, será despedido con una celebración litúrgica en la iglesia Catedral de esta ciudad, el próximo domingo desde las 18.
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Antes de emprender su viaje de regreso a España, el obispo emérito de la Prelatura de Humahuaca, Pedro Olmedo, será despedido con una celebración litúrgica en la iglesia Catedral de esta ciudad, el próximo domingo desde las 18.
Y el sábado a las 11 en la iglesia Nuestra Señora del Perpetuo Socorro de La Quiaca, la feligresía de la esa ciudad y demás comunidades de la Puna y Salta también tendrán la oportunidad de despedirlo asistiendo al oficio religioso en su honor.
El claretiano no solo goza de una amplia popularidad en la Quebrada y Puna por su misión pastoral, también en la capital jujeña y en otras ciudades que abarca la Diócesis de Jujuy donde es muy conocido, querido y valorado por su labor.
Las consideraciones impulsó al obispo de Jujuy, Daniel Fernández, a organizarle una despedida como signo de agradecimiento, para que la feligresía local asista al oficio y pueda saludarlo, ya que al día siguiente en la mañana emprenderá viaje a Europa acompañado del padre Miguel García.
Como un signo pastoral y elevar la oración a Dios, surgió la propuesta de una misa de acción de gracias en la cual participará el obispo Fernández; el obispo de la Prelatura de Humahuaca, Félix Paredes Cruz; y posiblemente el arzobispo de Salta, Mario Cargnello.
El oficio será presidido por Olmedo, quien en esa jornada será el agasajado y el destinatario de todos los agradecimientos que le brinde la ciudadanía y sacerdotes de la Diócesis que concurran invitados por el obispo Fernández.
El párroco de la iglesia Catedral, Manuel Alfaro, recordó que la Prelatura de Humahuaca nació durante la administración del segundo obispo de Jujuy, monseñor José Miguel Medina, "al observar que el primer obispo hacía todo el recorrido de la provincia civil. A lomo de mula y a caballo recorría lo que actualmente abarca la Prelatura de Humahuaca".
En 1965 se funda la institución prelaticia norteña, haciéndose cargo de esa jurisdicción desde el río Yacoraite (en Huacalera que divide los departamentos Tilcara y Huacalera), hasta La Quiaca, Susques y más allá como los poblados de Nazareno, Santa Victoria Oeste e Iruya, en Salta.
"Siempre hubo una muy buena relación entre ambas jurisdicciones eclesiásticas, desde monseñor Medina se trabajó conjuntamente con el obispo anterior a Olmedo, José María Bernal (de la Congregación Misioneros Claretianos de España), quien se hizo cargo", apuntó.
Con el regreso de Olmedo y otros curas a España, "prácticamente no quedarán claretianos" en la provincia, aseguró.
Alfaro recordó más adelante que cuando conoció a José María Bernal, al hacerse cargo de la Prelatura de Humahuaca, "Olmedo era un sacerdote que acompañaba al obispo. Era joven, con muchas ganas de trabajar, recién había sido ordenado en España y eligió venirse a Humahuaca".
Olmedo "fue un sacerdote realmente incansable, se 'inculturó' en todos los pueblos de la jurisdicción pastoral de la prelatura. Después cuando se hace cargo al morir Bernal, monseñor Antonio Raúl casado (tercer obispo de Jujuy), lo posesionó".
Por último, afirmó que "siempre hubo una muy buena relación con todos los sacerdotes (de la Prelatura). Cuando no tuvimos obispo porque monseñor Casado se había ido como arzobispo de Tucumán y estábamos esperando el nombramiento de uno nuevo para la Diócesis de Jujuy, nos acompañó cumpliendo su función".
El fin de semana pasado, Olmedo tuvo sus emotivas despedidas en Rinconada (el sábado) y en Abra Pampa (el domingo), con una masiva asistencia de familias de las comunidades donde misionó en todos estos años, adquiriendo el cariño, el reconocimiento y el respeto en cada rincón de la Puna y la Quebrada jujeñas y en la vecina Salta.
