En una radiante mañana el "Centro de Veteranos de Guerra de Malvinas" conmemoró ayer su 30° aniversario en un emotivo acto que reunió a veteranos, familiares, autoridades y miembros de la comunidad.
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En una radiante mañana el "Centro de Veteranos de Guerra de Malvinas" conmemoró ayer su 30° aniversario en un emotivo acto que reunió a veteranos, familiares, autoridades y miembros de la comunidad.
La ceremonia se llevó a cabo en las instalaciones del barrio Alto Comedero. La jornada se inició con el izamiento de la Bandera Nacional, se entonaron con fervor las estrofas del Himno con la Banda de Música del RIM 20. A continuación se guardó un minuto de silencio en homenaje a los caídos y veteranos de guerra jujeños que perdieron la vida.
Durante el acto legisladores y ediles entregaron sendas declaraciones de interés del acontecimiento. También se entregaron presentes a diputados, concejales y jefes de fuerzas de seguridad.
Las palabras alusivas estuvieron a cargo del presidente del centro, Paulino Guanuco, quien anunció la creación de un cuadro memorial que se colocará en la sala principal, como un tributo permanente a la memoria de los caídos.
"Nuestra misión no solo es recordar, sino también ayudar a quienes lo necesitan", afirmó. El centro participa activamente en eventos organizados por el Gobierno Provincial y la Municipalidad manteniendo un compromiso firme con la comunidad.
El excombatiente también compartió cómo el centro fue evolucionado desde sus humildes comienzos. "Esto era un monte deshabitado. Con esfuerzo y colaboración, logramos construir un espacio de encuentro y reconocimiento", recordó, enfatizando el apoyo comunitario y de las autoridades en el desarrollo del proyecto.
La "Malvinización" es una de las principales actividades del centro, cuentan con veteranos que visitan escuelas para compartir sus vivencias. Guanuco resaltó la importancia de transmitir su legado a las nuevas generaciones, "queremos que nuestros hijos y nietos conozcan nuestra historia y el sacrificio que hicimos".
A su turno, Juan Gerónimo, suboficial principal de la Armada y veterano de guerra destacó la evolución de la institución. "Cuando llegué a Jujuy en 2001 este lugar era solo un campo vacío. Hoy es un espacio vibrante y bien formado, un reflejo del compromiso de nuestra comunidad. Nuestro museo era una necesidad ahora podemos compartir nuestra historia y honrar a quienes sirvieron. Es fundamental que continuemos trabajando juntos para asegurar que las necesidades de nuestros veteranos sean atendidas y que su legado perdure", expresó.
Carlos Guillermo Díaz, hijo del fallecido veterano Carlos Díaz, compartió su profunda conexión con el lugar."Mi familia estuvo aquí desde el inicio cuidando el predio. Este lugar es testigo de muchas historias y recuerdos. Somos una gran familia, siempre unida ", dijo Díaz, quien expresó su tristeza por la ausencia de su padre en este aniversario, pero afirmó que su legado sigue vivo entre los presentes.
Este 30° aniversario no solo celebró el pasado, sino también renovó el compromiso de seguir trabajando por la memoria y el bienestar de todos los veteranos de guerra. Con una emotiva jornada, el Centro de Veteranos de Guerra de Malvinas reafirmó su lugar en la comunidad y dedicación por mantener viva la memoria de quienes lucharon por la patria. (Adriana Alfaro).