Se trata de una puesta teatral, que además de contar una historia, proponer una reflexión y brindar belleza, invita a disfrutar de un espacio donde la naturaleza es protagonista.
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Se trata de una puesta teatral, que además de contar una historia, proponer una reflexión y brindar belleza, invita a disfrutar de un espacio donde la naturaleza es protagonista.
Dice la sinopsis que se trata de una experiencia única sobre la increíble historia de un náufrago autoinfligido y un suicida fracasado. Dos personajes, una isla, una palmera y un coco como el alma del universo. Promete una historia conmovedora, profunda y original en un ambiente natural para vivir la experiencia teatral con todos los sentidos.
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¿Cómo describirías esta obra?
GABRIELA ESPINOZA: Es un trabajo bastante innovador desde la puesta en escena y como propuesta estética también, puesto que desde el estreno la hacemos (ya lleva 4 funciones anteriores), en el Lago Popeye, un lugar bien céntrico pero sin embargo cuando entrás, te encontrás con mucha naturaleza, agua, árboles, etc. Eso genera otra atmósfera. Cuando se eligió ese escenario como un espacio hallado, se pensó en la naturalidad que ofrece. No nos equivocamos, porque realmente se ven a dos seres, presos en una isla.
Además, nos encontramos con dos monstruos de la actuación, quien además de compañeros son amigos, Ciro y Eduardo, que muestran una entrega actoral es sorprendente.
El texto es muy extenso y no es tan fácil de memorizar por lo que trata cada personaje.Y los actores hicieron un gran trabajo, sobre todo por la química que hay entre ellos.
La experiencia de estar al aire libre nos hace que recomendemos al público llevar un abrigo, porque la cercanía del agua hace un ambiente fresco.
¿Cuándo se empezó a trabajar el proyecto, que finalmente se estrenó en diciembre pasado?
GE: Estrenamos el diciembre con muchas buenas repercusiones porque el público se va impactado, conmovido, etc.
CIRO MONTAÑO: La empezamos a trabajar seis meses antes del estreno.
¿Qué cuenta "La Isla" y cuál fue el desafío actoral de la obra?
CM: La obra es muy metafórica. Es la historia de un náufrago autoinflingido, a propósito, y un suicida fracasado porque no pudo matarse. Se encuentran en esta isla, y más allá de tener que sobrevivir a la situación de estar solos y abandonados, y la falta de comida y agua, también tienen que sobrevivir a sus demonios internos. Hay una batalla, en el interior de ambos y eso es lo que se desarrolla en la obra. Yo soy el náufrago.
GE: Los personajes se llaman Drígoro (Eduardo López) y Élax (Ciro), en alusión a dos amigos del autor que inspiraron estos textos con sus charlas.
¿Qué es lo que más les llamó la atención del público?
GE: Sobre todo la sorpresa ante la novedad. Por ser quizás nosotros los precursores en utilizar un espacio de este tipo. La verdad que es un espacio que se presta para cualquier otro tipo de espectáculo, como musicales, por ejemplo.
Estamos muy conformes con el lugar, tanto nosotros como Raquel Gareca y Luis León, que son los dueños de este lago.
¿Dónde pondrían más el foco de esta obra, en el espacio, en el mensaje, en la puesta…?
CM: Más allá de la experiencia natural, en la sensorial y mental, porque la obra habla de temas muy existenciales, que no son ajenos a nadie y los abordamos de una manera extrema, como son dos tipos abandonados en una isla. Porque a veces no distraen los horarios, la familia, los compromisos, y acá los personajes no tienen nada, y pueden pensar sólo en lo importante. Lo que nos resalta el público, es la experiencia interna con la que se van.
GE: Yo pongo especial énfasis en el peso actoral de la obra, en la entrega actoral de los intérpretes. El ambiente que provoca la música de la obra es muy lindo también. Es muy visual porque ellos comprometen mucho el físico. Se puede hablar de teatro físico por eso.
Tiene una composición musical
GE: Sí, Galo Maidana (músico jujeño) estuvo haciendo la composición de uno de los temas de la obra. Es una canción que canta uno de los personajes, que Galo la musicalizó en guitarra y en piano, con la dificultad de que, a la guitarra, en la trama de la historia, le falta una cuerda, entonces el músico la compuso en estas condiciones. Eso le da un plus.
Después de esta función ¿qué tienen pensado con esta obra?
GE: Seguir haciendo funciones en el Lago de Popeye, y girar nacional e internacionalmente en festivales. Queremos que la obra se expanda.