El reconocido artista plástico jujeño Juan José Molina ha inaugurado su nueva muestra "Caminantes" en el Salón Pachamama del Cabildo de San Salvador de Jujuy. La exposición, abierta al público con entrada gratuita desde el 15 de noviembre, es una reflexión artística sobre los hombres y mujeres en permanente movimiento, quienes construyen caminos, tejen historias y dan vida a los pueblos.
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El reconocido artista plástico jujeño Juan José Molina ha inaugurado su nueva muestra "Caminantes" en el Salón Pachamama del Cabildo de San Salvador de Jujuy. La exposición, abierta al público con entrada gratuita desde el 15 de noviembre, es una reflexión artística sobre los hombres y mujeres en permanente movimiento, quienes construyen caminos, tejen historias y dan vida a los pueblos.
Molina, con una trayectoria de 47 años en el arte, presenta en esta muestra un conjunto de obras inéditas que combinan maestría técnica y profundidad conceptual. Según el propio artista, "Caminantes" rinde homenaje a los seres humanos en su búsqueda interna y externa: "Es un tributo al hombre común, ese que camina todos los días, recorriendo lugares y buscando algo más en su vida. Es un reflejo de la lucha diaria y la capacidad de seguir adelante", expresó el artista durante una entrevista reciente en el ciclo online "El Matutino" de El Tribuno de Jujuy.
El salón Pachamama, ubicado dentro del Cabildo Histórico de Jujuy, se convierte en un escenario ideal para esta exposición. Molina destacó la calidad del espacio, describiéndolo como "una sala de muy buen nivel, con paredes revestidas en tablillas que aportan calidez y realzan las obras. La selección del lugar no fue casual, la amplitud y características del salón permitieron exponer piezas de gran formato, algunas de hasta dos metros de altura", contó.
El montaje de la muestra fue realizado con el apoyo del equipo de Cultura de la provincia, quienes trabajaron en la curaduría y disposición de las obras. Molina explicó que esta colaboración fue fundamental para resaltar la esencia de "Caminantes". "Se trabajó con mucho cuidado para que cada obra tuviera su espacio y diálogo propio dentro del salón".
Uno de los elementos centrales en la obra de Molina es el "caminante", un personaje recurrente que lo acompaña desde hace más de 30 años. Este pequeño hombre, surgido inicialmente como un dibujo casual, se convirtió en un símbolo de resiliencia y humanidad. "Es un personaje que adopté hace décadas. Representa esa búsqueda interna que todos llevamos dentro, esa lucha constante por avanzar, a pesar de las adversidades", explicó el artista.
En la muestra, el caminante aparece en distintos contextos, desde paisajes puneños hasta escenarios urbanos, integrándose en composiciones que combinan realismo y abstracción. Una de las piezas más destacadas es el "Tríptico Puneño", en el que Molina retrata con detalle elementos de la cultura y geografía del norte argentino.
En cuanto a los materiales y técnicas utilizados, Molina se mantiene fiel a su estilo característico, priorizando el óleo por su textura y versatilidad. "El óleo tiene un perfume y una plasticidad que me permiten jugar con relieves y espátulas, creando capas que dan vida y profundidad a la obra", señaló.
Sin embargo, también se anima a experimentar con acrílicos, lápices y técnicas mixtas, como en la obra "El Arca", donde combina diferentes materiales para explorar nuevas formas de expresión.
Con casi cinco décadas dedicadas al arte, Molina ha logrado consolidarse como uno de los artistas más destacados de Jujuy. Sus obras han sido expuestas tanto a nivel nacional como internacional, y su compromiso con el arte lo ha llevado a ser una figura inspiradora para las nuevas generaciones.
No obstante, Molina no oculta las dificultades de ser artista en un contexto económico desafiante. "Insertarse en el mercado del arte no es fácil, especialmente en tiempos de crisis, cuando la gente prioriza otras necesidades. Pero en Jujuy tenemos un mercado que está creciendo, gracias al empuje de los jóvenes artistas y al interés creciente por la cultura local", comentó.
La muestra "Caminantes" no solo es un testimonio del talento de Molina, sino también una invitación a reflexionar sobre el valor de los caminos que recorremos, tanto físicos como emocionales.
El propio artista confesó sentirse emocionado al ver su trabajo expuesto en un lugar tan emblemático: "Cada muestra es un recordatorio de los años de esfuerzo, aprendizaje y pasión que he dedicado al arte. Ver mis obras en un espacio como el Salón Pachamama me llena de orgullo y gratitud".
Aunque la muestra en el Salón Pachamama tiene un tiempo limitado, el trabajo de Molina no se detiene. Su taller, ubicado en San Salvador de Jujuy, está abierto para quienes deseen conocer más sobre su proceso creativo y sus obras. "El taller es mi refugio. Ahí trabajo solo, siempre acompañado de música. Me encanta recibir visitas, porque el arte también es compartir. Muchas veces, invito a la gente a pintar conmigo, a experimentar esa conexión con el color y la forma", compartió.
"Caminantes" es mucho más que una colección de obras; es una celebración de la humanidad en movimiento, de la búsqueda constante y de los lazos que nos conectan. En cada trazo, en cada textura, Molina nos invita a reflexionar sobre nuestros propios caminos y las historias que construimos al recorrerlos.